Nueve años de prisión para el acusado de quemar dos veces la casa de su ex novia en Fuensalida (Toledo)

TOLEDO, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Toledo ha condenado a J.G.R.G, al que juzgó a finales de mayo por haber quemado en dos ocasiones la vivienda de su compañera sentimental en julio de 2007, a nueve años de prisión, por un delito de incendio, y a 42 días de multa, por una falta de ofensas leves a los agentes de autoridad que lo detuvieron.

El tribunal toledano considera que en el acusado concurre la eximente incompleta o atenuante mixta de estado pasional y embriaguez, según consta en la sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press.

Como hechos probados, el tribunal admite que en torno a las 9.30 horas del día 28 de julio de 2007, el procesado, accedió al domicilio de su ex compañera sentimental R.A.R., morada en la que había permanecido durante el transcurso de la noche en compañía de ella, hasta cerca de las 7.00 horas, momento en la que ambos abandonaron la vivienda. R.A.R. se encaminó a su puesto de trabajo, mientras que el acusado se quedó en un lugar cercano.

Jesús mantuvo una discusión a lo largo de la madrugada con R.A.R. tratando ésta última de tranquilizarle en vano, y en un momento concreto de la disputa, le dijo a su ex compañera: "espero que tengas una seguro porque te voy a quemar la casa".

Tal anunció fue premonitorio, considera el tribunal, porque poco después, sobre las 9.20 horas, el acusado accedió a la vivienda, sin forzar la puerta, y en el interior, siendo consciente de que en el inmueble residían otras familias y que al actuar de esa manera ponía en peligro sus vidas, prendió fuego a la casa, provocando hasta tres focos en diferentes estancias.

INSPECCIÓN Y PRECINTO

Después de que los bomberos extinguieran el incendio, tras localizar esos tres focos, agentes de la policía judicial de la Guardia Civil realizaron una inspección ocular con la propietaria, y precintaron la puerta de acceso a la misma.

Más tarde, sobre las 10.20 horas el acusado volvió a acercarse al lugar de los hechos, y fue trasladado por los agentes de la Guardia Civil al cuartel, para tomarle declaración, lugar que abandonó sobre las 10.30 horas.

Pero, sobre las 13.30 horas, el acusado volvió a irrumpir en el inmueble tratando varios vecinos de que no ascendiera la escalera, advirtiéndole de que se iba a meter en un problema.

Sobre las 14.10 horas una patrulla de la Guardia Civil observó humo, por lo que volvieron a evacuar a los vecinos, y los bomberos volvieron a sofocar el incendio. El acusado volvió más tarde a hacer acto de presencia en el lugar de los hechos en estado de gran nerviosismo, mostrando signos de haber consumido alcohol, siendo detenido.

Fue en ese proceso y en el posterior traslado al hospital de Toledo, cuando el acusado comenzó a insultar a los agentes, y dijo "decirle a R.A.R. que se vaya de Fuensalida porque cuando salga la voy a matar".

Por último, según consta en la sentencia, el tribunal reconoce que el acusado "es una persona politoxicómana, encontrándose en el momento de los hechos bajo los efectos de una moderada intoxicación etílica, experimentando por ello una afectación de sus facultades cognitivas, especialmente de su capacidad de libre albedrío debido a la dificultad que exhibía para controlar sus impulsos".