SANTIAGO DE COMPOSTELA, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El líder del Partido Popular de Galicia (PPdeG), Alberto Núñez Feijóo, acusó hoy al PSdeG y al BNG de "faltar al respeto a los ciudadanos" al "traficar con los votos" de los emigrantes y de la tercera edad en los mítines.
"Los nacionalistas acusan a los socialistas de tráfico de votos en la emigración y los socialistas acusan a los nacionalistas de hacer los mismo en los mítines de la tercera edad, y lo peor de todo es que es cierto", lamentó el líder los populares gallegos durante su intervención en Santiago en un acto ante diputados, alcaldes y portavoces del partido.
En el transcurso del balance del año 2007 realizado, Feijóo aseguró que fue un año "muy importante" desde el punto de vista político debido a la modificación de tres Gobiernos municipales, la próxima finalización de legislatura del Gobierno central y el ecuador del Gobierno autonómico. "Es necesario rendir cuentas con rigor, datos y fechas", añadió.
A la cita acudieron numerosos miembros del PPdeG, entre los que se encontraban los diputados Manuel Ruiz Rivas, Carlos Negreira y José Manuel Balseiro, así como la líder popular en Vigo, Corina Porro.
"PERMANENTES DISPUTAS"
En la línea de las "permanentes disputas" entre los miembros del bipartito, Núñez Feijóo resaltó las polémicas sobre el himno gallego en las guarderías y recordó el debate sobre el posible cambio horario en la Comunidad gallega. En este sentido, consideró que el Gobierno "se entiende peor en el tercer año que en la primera semana".
"En nuestra opinión, el Gobierno bipartito creó más problemas que soluciones para Galicia y la oposición fue más útil que el propio Gobierno", proclamó.
De este modo, estimó que la imagen exterior de Galicia y la calidad de sus servicios públicos esenciales, así como su competitividad económica y el poder adquisitivo de sus ciudadanos son las pérdidas de la comunidad gallega durante esta legislatura.
Asimismo, se refirió a la restricción de derechos y libertades de los ciudadanos, debido al "intervencionismo del Gobierno en la vida privada de las personas y las familias". "Es lamentable y preocupante", apostilló.
