MIAJADAS (CÁCERES), 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las obras e infraestructuras de modernización y consolidación de los regadíos de la Comunidad General de Regantes del Canal de Orellana, en las provincias de Cáceres y Badajoz han supuesto una inversión de más de 27 millones de euros.
Estas obras fueron inauguradas hoy por parte de la ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, en un acto que se celebró en Miajadas (Cáceres), y que contó con la asistencia del presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, así como del presidente de SEIASA de la Meseta Sur, Francisco Rodríguez.
Las obras, promovidas por SEIASA de la Meseta Sur, beneficiarán a 5.218 regantes en una superficie de 40.285 hectáreas, ubicadas en los términos municipales de Acedera, Don Benito, Guareña, Medellín, Navalvillar de Pela, Orellana la Vieja, Rena, Santa Amalia, Villanueva de la Serena y Villar de Rena en Badajoz, y Alcollarín, Almohadin, Campolugar, Escurial, Madrigalejo y Miajadas en Cáceres.Las obras permitirán un ahorro de agua superior al 20 por ciento, casi 100 hectómetros cúbicos anuales
Así, y según informa el MAPA, la distribución de agua a partir del Canal de Orellana se ha realizado durante 25 años mediante una red de acequias de hormigón, pero debido al agotamiento de su vida útil, la red "se encontraba en un deficiente estado de conservación", con numerosas fugas de agua motivadas por asentamientos de terreno, deterioro de juntas, aparición de grietas y roturas en el hormigón, por eso se hacía necesaria una modernización de dicha red.
Ante esta situación, explica que el objeto de la modernización ha consistido en la rehabilitación y adecuación de la red hidráulica actual desarrollando acciones encaminadas a evitar las filtraciones de agua, como son la sustitución por acequia prefabricada de hormigón, entubado de acequias, impermeabilización de juntas, revestimiento de la superficie interior, reparación puntual de fugas, etc. que se han aplicado según las necesidades de cada tramo de la red de distribución.
SUSTITUCIÓN DE COMPUERTAS Y PARTIDORES
También se han reparado o sustituido las compuertas y partidores averiados, señala el ministerio, quien informa que las 512 acequias nuevas creadas suman 215 kilómetros construidos, 39 de ellos con tubería de acequia, además de contar con 520 arquetas. Para completar ese recorrido ha sido necesario implantar 127 unidades de paso de losa, y se han impermeabilizado 77 kilómetros del canal.
Como innovación tecnológica se ha instalado un sistema de monitorización en tiempo real de sensores hidrológicos con la implantación de 50 equipos de medida de caudal en acequias basados en tecnología "doppler". A su vez la captura de datos será transmitida a través de comunicaciones GPRS hasta un servidor WEB para su consulta.
La modernización de los regadíos tiene por objeto general el uso eficiente del agua, estando previsto un ahorro de agua de 96,7 hectómetros cúbicos al año. También supondrá una mejora de la productividad de los cultivos, que podría alcanzar hasta un 25%. Con las mejoras se persigue además mejorar la calidad de vida de los agricultores y velar por la calidad medioambiental.
Cabe recordar que el MAPA, a través de SEIASA de Meseta Sur, acomete en Extremadura obras contempladas en el Plan Nacional de Regadíos y en el Plan de Choque 2006-2007 del Gobierno de España, por valor de 130 Millones de euros que afectarán a una superficie de 138.039 hectáreas y de las que se beneficiarán 26.014 regantes.
INAUGURACIÓN DE LA MINISTRA
Durante el acto de inauguración de estas obras, la ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, mostró su satisfacción porque permitirán incrementar la productividad agrícola de las explotaciones, mejorar las condiciones de trabajo de los regantes, y por tanto su calidad de vida, y mejorar también el medio ambiente; propiciando un ahorro de agua superior al 20 por ciento, casi 100 hectómetros cúbicos anuales.
La obra no es una actuación aislada, señaló la ministra, sino que se inscribe en una "apuesta de futuro del actual Gobierno de España por Extremadura", como es lo que representa el Plan Nacional de Regadíos, del que se han ejecutado ya más de 125 millones de euros, rebasando ampliamente los casi 90 Millones previstos, y en el que la inversión realizada en esta legislatura es de más de 115 millones.
En este sentido, Espinosa que en esta legislatura se han finalizado en Extremadura ocho obras de modernización de regadíos, siete de ellas también iniciadas en este período, realizadas a través de la SEIASA, con la cooperación de la Junta, de los regantes y de las constructoras.
Elena Espinosa resaltó que para el Gobierno, esta región, y su medio rural, son una prioridad, y que ya lo demostró en 2004 con un plan específico para esta región, con un amplio conjunto de actuaciones, con casi todos los Ministerios implicados, para dar respuesta a las necesidades reales de los extremeños.
Recordó que en julio de 2005, el MAPA firmó con la Junta de Extremadura un convenio de infraestructuras para la mejora de caminos rurales y la vertebración del territorio, con una inversión de 76 millones de euros. Fue la primera vez que se suscribió un convenio de infraestructuras de esa magnitud.
Así, la ministra agradeció a la Junta de Extremadura la cooperación para desarrollar todo tipo de actuaciones, como obras de regadío, el convenio de caminos, al que la Junta aportó 30 millones de euros, y su implicación para definir lo que han de ser las orientaciones del desarrollo rural en los próximos años, acogiendo este año la Conferencia Internacional de la OCDE sobre innovación en el medio rural.
Elena Espinosa ha manifestado su confianza en aplicar al máximo la Ley para el Desarrollo Sostenible del Medio Rural que el Congreso de los Diputados aprobó hace dos semanas, y en la que se prevé que Extremadura sea una de las regiones más beneficiadas con esta Ley, ya que el 65 por ciento de su población es rural.
La ley, ha dicho la Ministra, persigue "objetivos tan concretos" como consolidar la cohesión económica y social del medio rural y, por tanto, del país; equiparar derechos y oportunidades, es decir, garantizar a los ciudadanos del campo unos servicios y unos niveles de vida equiparables a los que se disfrutan en la ciudad; y frenar el despoblamiento y la desertización de amplios territorios rurales, protegiendo con ello el medio ambiente, señaló el MAPA.
