SEVILLA 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
Uno de los ocupas de 'Casas Viejas' que se encadenó en un zulo del Centro Social Ocupado y Autogestionado (CSOA) para evitar su desalojo, Agustín, acudió hoy como imputado al Juzgado de Instrucción número 17 de Sevilla por las presuntas injurias y calumnias que cometió al acusar a la Policía y a los Bomberos de malos tratos, si bien se acogió a su derecho a no prestar declaración, según explicaron a Europa Press fuentes del caso.
La comparecencia judicial ha tenido lugar después de que la Fiscalía sevillana pusiera en conocimiento de dicho juzgado el pasado mes de enero una denuncia presentada por el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, contra los propios ocupas por presuntas injurias y calumnias, ya que, según el denunciante, las acusaciones de los detenidos --criticaron maltratos de la Policía y Bomberos-- causan "graves perjuicios al prestigio" de las instituciones.
La denuncia del representante gubernamental fue acompañada de documentos audiovisuales en los que se recogían las manifestaciones vertidas por los ocupas en rueda de prensa al finalizar el encierro, por lo que Instrucción 17 comenzó a investigar tales hechos.
EL DESALOJO.
El origen de todo se remonta al pasado 29 de noviembre, cuando más de 60 agentes de la Policía Nacional cercaron el recinto de 'Casas Viejas' y asaltaron las instalaciones derribando a su paso todas las defensas habilitadas por el colectivo de ocupas, que habían preparado una "resistencia pacífica" anclando a cuatro de sus miembros al suelo de la primera planta y a dos de ellos a los muros de un zulo construido tras un túnel de cuatro metros de profundidad.
Dentro del zulo, que estaba incluso protegido por una puerta "blindada", los 'ocupas' habían instalado un sistema de ventilación mecánica para permitir la supervivencia de Iván y Agustín, que resultan ser los fundadores de 'Casas Viejas' y que fueron desalojados tras 36 horas de resistencia.