El órgano supervisor de EEUU pide a la Fuerza Aérea que revise la adjudicación a EADS y Northrop de 180 aviones cisterna

Actualizado: miércoles, 18 junio 2008 23:59

MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Oficina de Supervisión del Gobierno estadounidense (GAO, por sus siglas en inglés) comunicó hoy que ha detectado "una serie de errores significativos" en el contrato de 180 aviones de reabastecimiento en vuelo adjudicado al consorcio europeo EADS y a su socio norteamericano Northrop Grumman, por lo que recomendó a la Fuerza Aérea estadounidense (USAF) que "reabra" el proceso de selección.

"Nuestra visión del documento nos lleva a concluir que la Fuerza Aérea había cometido una serie de errores significativos que podría afectar al resultado de lo que era una competición muy cerrada entre Boeing y Northrop Grumman. Nosotros, por tanto, apoyamos la protesta oficial presentada por Boeing", señaló Michael R. Golden, jefe del Departamento de Procesos Legales del organismo supervisor.

El denominado programa KC-X, presupuestado con unos 40.000 millones de dólares, supondrá la compra de 180 aviones de reabastecimiento en vuelo y ha sido el mayor contrato de este tipo de aeronaves adjudicado por el Pentágono al consorcio aeroespacial europeo EADS en alianza con la firma estadounidense Northrop Grumman. La adquisición del programa al grupo empresarial franco-alemán tiene especial importancia en su filial española, EADS-CASA, al ser la titular de su División de Aviones de Transporte Militar y la responsable del diseño del sistema de reabastecimiento 'Boom', una de las principales cualidades del modelo A330 MRTT.

La oficina de control da la razón a Boeing en una de las principales alegaciones, el menor coste económico por ciclo de vida del B767 frente al Airbus A330 MRTT, al afirmar que la evaluación realizada ha sido "inaceptable" y que la corrección de los errores situaría a Boeing como "la oferta de menor coste económico por ciclo de vida".

La GAO recomendó que la Fuerza Aérea estadounidense "reabra" el proceso de discusión con las empresas que se presentaron al denominado programa KC-X, Boeing y Northrop Grumman, obtenga "propuestas revisadas" de las compañías, las "re-evalúe" y habilite un "nuevo" proceso de adjudicación "consistente" con sus recomendaciones.

"También negamos una serie de alegaciones de Boeing sobre la adjudicación a Northrop Grumman porque creemos que el documento no nos proporcionaba una base para determinar que la agencia haya violado los requerimientos legales como denunciaban dichas alegaciones", añadió.

El organismo de control trasladó a la Fuerza Aérea estadounidense que si cree que el pedido de aviones "no cumple adecuadamente sus necesidades" debería rectificarlo y mantener "más discusiones" con las compañías participantes en el proceso de selección, al tiempo que le recomienda que, en el caso de que Boeing sea finalmente la empresa concesionaria, rescinda el contrato con Northrop y pague a Boeing el coste del proceso de protesta oficial que emprendió tras la adjudicación del contrato a su competidor en marzo.

Tras recordar que la USAF tendrá un plazo de 60 días para informarle de las acciones que adoptará para cumplir sus recomendaciones, la GAO subrayó que su decisión "no debe ser interpretada como un juicio sobre los méritos de los aviones de cada una de las firmas".

La oficina supervisora explicó que sus recomendaciones se basan en una serie de hechos sucedidos durante el concurso. En primer lugar, la Fuerza Aérea no informó a las compañías de la importancia que tenía cada uno de los requisitos que se exigían en el concurso ni valoró los requerimientos técnicos "no obligatorios" que cumplía la aeronave de Boeing. Además, en la adjudicación se tuvo en cuenta el exceso de capacidad en un parámetro de reabastecimiento en vuelo del avión de EADS cuando, según las bases del contrato, los excesos no se considerarían.

Otros de los hechos en que basa su decisión fue las "desiguales" discusiones mantenidas con Boeing, al informarle primero de que su aparato cumplía por completo un requerimiento y después trasladarle que lo cubría parcialmente. En contra de la primera firma estadounidense, la GAO asegura que su alegación de que el A330 de Northrop y EADS no tiene compatibilidad con todas las aeronaves de la USAF "no está demostrada".

El pasado 1 de marzo, la Fuerza Aérea estadounidense comunicó oficialmente a Northrop Grumman y EADS su decisión de concederles el contrato para renovar la flota de aviones de reabastecimiento en vuelo, dotado con un presupuesto cercano a los 40.000 millones de dólares. El denominado programa KC-X implica la compra de unos 180 aviones cisterna en varias fases durante la próxima década para sustituir la flota de 'tanqueros' modelo KC135 Stratotanker, que actualmente presta servicio en el Ejército del Aire estadounidense.