TOLEDO, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha denunciado que la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales ha enviado una misiva a los ayuntamientos de la región comunicándoles que reduce en un 25 por ciento su aportación al Plan Concertado de servicios sociales.
En el caso del Ayuntamiento de Toledo supone un recorte del 66 al 40 por ciento, es decir, unos 160.000 euros menos, ha apuntado el regidor toledano, quien ha dicho que debido a este recorte el Consistorio de la capital regional se ve en la tesitura de tener que despedir a más de diez personas en las próximas semanas o recortar un 30 por ciento las prestaciones sociales en la ciudad de Toledo.
No obstante, el alcalde ha enviado un mensaje de tranquilidad a los trabajadores sociales y ha asegurado que todos sus "esfuerzos" irán dirigidos a mantener el empleo, de manera que si es necesario el equipo de Gobierno que él dirige planteará recortes de aportaciones del Ayuntamiento a otras instituciones o a otros programas "con tal de no despedir a los trabajadores sociales".
"Hay que ser un desalmado política y personalmente para que cuando peor se está pasando, la gente no tenga ni ventanilla a la que asomarse ni trabajadores sociales a los que acudir", ha espetado el alcalde de Toledo, quien considera este recorte "una auténtica vergüenza política".
Dicho esto, García-Page ha afirmado que o actúa la Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha (FEMP C-LM) o el PSOE se tendrá que plantear "alguna decisión" en relación a este organismo, recalcando que no se descarta ninguna decisión, porque "la FEMP está a los pies de Cospedal y no reivindica para nada los derechos de los ayuntamientos".
Asimismo, ha anunciado que va a solicitar una reunión con el presidente de la FEMP, Santiago Lucas-Torres, para tratar este asunto, y quiere que se produzca antes de que finalice el año. "En función de si se compromete o no se compromete empezaremos a estudiar decisiones", ha indicado.