MADRID, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El ex-presidente del Gobierno, José María Aznar, acudió esta mañana acompañado de su esposa, Ana Botella, al domicilio que tenía Loyola de Palacio en Madrid, y en el se instaló la capilla ardiente, para mostrar sus condolencias a la familia de la fallecida.
Aznar se detuvo un momento antes de entrar en la casa para atender a los medios de comunicación que se habían congregado ante la puerta, pero se limitó a señalar el "gran cariño" que tanto él como su esposa tenían a Loyola de Palacio. "Queríamos mucho a Loyola, y no quiero decir nada más", dijo.