MADRID, 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los grupos parlamentarios del Congreso certificaron este mediodía la ruptura de las negociaciones para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que lleva casi un año en funciones y que, después de este intento frustrado, seguirá así al menos otros seis meses. El PP y los demás partidos escenificaron su fracaso achacándose mutuamente las culpas y los reproches.
Después de que las conversaciones se desbloqueasen en septiembre y de que todos los grupos recibiesen formalmente a las cuatro asociaciones del mundo judicial --Asociación Profesional de la Magistratura (APM), Jueces para la Democracia, Francisco de Vitoria y Unión Judicial Independiente--, los portavoces se habían citado esta mañana para, por primera vez, todos pusieran nombres sobre la mesa.
Sin embargo, este nuevo intento por renovar el CGPJ saltó por los aires el pasado martes cuando el portavoz del Grupo Popular, Eduardo Zaplana, anunció que el PP dejaba en suspenso las negociaciones alegando su disconformidad con la recusación de dos magistrados del Constitucional por parte del Gobierno y con la propuesta electoral socialista de promover jueces sin oposición entre licenciados con expediente académico destacado.
PP ACUDIÓ "POR CORTESÍA".
Pese a ello, el PSOE y las formaciones minoritarias decidieron mantener la cita de esta mañana y, estando ya reunidos, se sumó el secretario general del Grupo Popular, Jorge Fernández Díaz, quien rubricó el 'portazo' del PP a las negociaciones.
Según dijo a los periodistas el 'número dos' del PP en el Congreso, la propuesta hecha pública por el ministro Mariano Fernández Bermejo había sido "la gota que ha colmado el vaso" y el PP lo consideraba una "falta de respeto" que impedía seguir negociando.
En una rueda de prensa posterior, Zaplana indicó que él no podía acudir a la cita, pero envió a Fernández Díaz a la reunión por "cortesía" y por "respeto" a los demás, si bien subrayó que la posición ya había quedado "clarísima" desde el martes.
A su juicio, el PSOE y las minorías estaban interesados en "hacer un número" con esta reunión, dentro de una "estrategia de manipulación", pero insistió en que había otras maneras de buscar un acuerdo, como se dio con la Corporación de RTVE. "Esto de iniciativas unilaterales y rupturas de consenso no es forma de negociar --señaló--. Si de verdad quieren un día, ya llamarán".
PSOE: ARGUMENTOS "FALACES E INCONSISTENTES"
A renglón seguido, el portavoz socialista, Diego López Garrido, tachó de "falaces" e "inconsistentes" los argumentos del PP, subrayando que la propuesta de Bermejo se enmarca en el programa electoral del PSOE para marzo y, por tanto, no tenía que ser consultada con la oposición.
En su opinión, la reunión de hoy ha servido para "constatar" que el PP no quiere la renovación del CGPJ. "El PP ha venido bloqueando el CGPJ para seguir utilizándolo como hasta ahora. Si antes utilizaba subterfugios, hoy ya se ha quitado la careta y ha dicho que no le da la gana renovarlo", resumió.
Según López Garrido, con esta decisión el PP se sitúa "al margen de las disposiciones legales", que obligan a renovar el órgano del Poder Judicial. "Es una posición anticonstitucional, contraria a la legalidad --proclamó--. Una auténtica insurrección".
En ese contexto, anunció que el PSOE y las minorías se han vuelto a citar el 6 de noviembre y emplazan al PP a acudir. Si se mantiene la actual situación, estudiarán posibles actuaciones, si bien no precisó de qué tipo. En cualquier caso, la renovación sin el PP es imposible ya que los nombramientos exigen mayorías cualificadas.
IU-ICV: FRAUDE DEL PP.
También el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, hizo público un comunicado criticando la actitud de los 'populares'. A su entender, "el boicot que mantiene el PP supone un claro fraude de ley premeditado y un chantaje intolerable más que sumar a la larga lista a la que nos tiene acostumbrado la derecha de este país en la presente legislatura".
El presidente del grupo parlamentario de IU-ICV también descalifica la argumentación del PP al considerar que se trata de "falsedades, excusas e hipócritas acusaciones", y confirmó la cita de dentro de dos semanas.
"Ni IU-ICV ni el resto de grupos parlamentarios debemos consentir por un momento más el intento de tomadura de pelo que busca la derecha y que afecta también a la voluntad y al mandato expresado por las organizaciones judiciales para que se lleve a cabo una renovación que ya se debería haber afrontado en serio hace casi un año", sostiene la nota de prensa.
Por su parte, ERC y CiU también lamentaron la actitud de los 'populares'. El primero de ellos indicó que, con esta decisión, el PP deja claro que nunca tuvo interés en acometer la renovación del CGPJ y le afeó que "juegue con las instituciones". En esta misma línea, CiU le advirtió que "no tiene sentido que bloquee las instituciones" y denunció que tanto PP como PSOE están situando al CGPJ y también el Tribunal Constitucional (TC) "contra la pared de manera partidaria y partidista".
20 PUESTOS PARA CUBRIR.
Conforme a la legislación, doce de los 20 vocales del CGPJ han de ser jueces y magistrados procedentes del listado de 36 candidatos que remitieron las asociaciones y los no adscritos, y los otros ocho se reservan a juristas de reconocido prestigio. Los veinte elegidos deben proponer después un presidente, que a la vez lo será del Tribunal Supremo.
La última propuesta de los socialistas, avalada por las minorías, es que ninguna de las dos corrientes político-judiciales --el PP más la APM, por un lado, y el PSOE y Jueces para la Democracia, por otro-- alcance los nueve puestos que dan la minoría de bloqueo en la institución, lo que permitiría dar entrada a la Francisco de Vitoria y a las sugerencias de las minorías (CiU, PNV, ERC e IU-ICV).
