Pasan a disposición judicial los 31 detenidos por robo de cable en la provincia de Ciudad Real

CIUDAD REAL, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -

Las 31 personas que fueron detenidos en la provincia de Ciudad Real el pasado viernes por robo de cobre en las explotaciones agrarias ya han pasado a disposición de los juzgado de Daimiel y Tomelloso, habiéndose decretado el ingreso en prisión de nueve de ellas, mientras que, según confirmaron a Europa Press fuentes cercanas a la investigación, el fiscal ha solicitado cárcel para 13 de las 22 personas que declaran en los juzgados de Tomelloso.

Según explicó hoy el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz Cano, la denominada operación "Voltaika" se inició hace casi un año y ha permitido la detención de una banda organizada a la que se atribuyen un total de 46 robos en la comarca de La Mancha, y tres de ellos con violencia e intimidación que habrían sido perpretados por cinco de los integrantes del grupo.

Díaz Cano, que compareció en rueda de prensa en la subdelegación del Gobierno de Ciudad Real acompañado por el subdelegado, Miguel Lacruz, así como por representantes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, reseñó que los robos que se les atribuyen a esta banda, cuyas bases de operaciones se ubicaban en Argamasilla de Alba y Villarrubia de los Ojos, se distribuyen entre las localidades de Alcázar de San Juan (14); algunos en las pedanías de Cinco Casas y Alameda de Cervera, Argamasilla de Alba (12), Herencia (10), Villarta de San Juan (3), Villarrubia de los Ojos (2) y Pozuelo de Calatrava (2).

En los registros efectuados, se han recuperado herramientas utilizadas por los detenidos para perpetrar los robos, tales como cizallas y alicates, cuerdas y otros elementos aislantes utilizados para agarrar los cables eléctricos cargados de corriente para no sufrir descargas, una báscula portátil utilizada para pesar el cobre sustraído y linternas y otros elementos para iluminar la zona de actuación durante la comisión de los hechos.

Además, se han recuperado trozos de cable de cobre con funda, conocido en el argot delictivo como cable sucio, y un rollo de cable de cobre sin funda, conocido también como cable limpio. También se les han incautado seis vehículos que utilizaban para desplazarse por el campo y cometer los robos.

Según destacó el delegado del Gobierno en la región, el modus operandi de esta banda, integrada por 24 hombres y siete mujeres de entre 18 y 49 años, todos de origen rumano, consistía en un reconocimiento previo de la zona donde iban a actuar, tras lo que en pequeños grupos perpetraban los robos, hasta diez en una noche, mientras disponían vehículos en los caminos para vigilar y avisar de la presencia policial.

Una vez cometido el delito, el material lo colocaban en un camión para que lo transportara al centro de recepción, por lo que la operación permanece abierta para lograr la localización del mismo.

OTROS DELITOS

Por otra parte, además de los delitos de robo, a 18 de las personas detenidas se les imputan otro delito de tráfico de drogas ya que, indicó Díaz Cano, "cuando se vieron acorralados por la Guardia Civil y la Policía Nacional, decidieron desplazarse a Marruecos para traer hachís a España. Para ello, ocho personas introdujeron en sus estómagos un kilo de hachís en bolas o bellotas, algo muy peligrosos que obligó a uno de ellos a tener que pedir ayuda en Madrid para que lo trasladaran a un centro hospitalario".

Asimismo, también se cree que los detenidos están implicados en otros robos de gasóleo, herramientas y ganado, concretamente de 18 cerdos sustraídos en Argamasilla de Alba.

"En definitiva, es el golpe más importante que se ha dado en Castilla-La Mancha a un grupo de delincuentes que estaban creando alarma en el sector agrario y que llevó a los agricultores a reforzar la seguridad en sus explotaciones. Pero el trabajo de la Policía Nacional y la Guardia Civil han producido sensación de sosiego y tranquilidad, aunque sin bajar la guardia", concluyó Díaz Cano, quien felicitó a las Fuerzas de Seguridad del Estado.