BILBAO, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, aseguró hoy que el tripartito del Gobierno vasco, a pesar de la "preferencia" de su formación por extenderlo a otros ámbitos, "no es fórmula consagrada" para todas las instituciones de la Comunidad Autónoma. En este sentido, criticó que "son otras las formaciones políticas, EA y EB, quienes han tenido una actitud no leal con esa vocación del PNV".
En una entrevista en Radio Euskadi, recogida por Europa Press, preguntado sobre la tramitación parlamentaria de la normativa para un nuevo marco de relaciones entre la Comunidad Autónoma Vasca y el Estado, tras el rechazo en las Cortes del conocido como Plan Ibarretxe, Urkullu criticó "los juegos retóricos" de PSE, PSOE y Batasuna que "luego no se concretan en nada". Por este motivo, pidió un compromiso a los partidos "constitucionalistas" para "hacer respetar" en las cámaras estatales el acuerdo de las instituciones vascas para ese nuevo marco.
Urkullu explicó, respecto a la situación del tripartito, que en los últimos meses "por los avatares de los resultados electorales o por la voluntades u opciones de otras formaciones políticas se ha podido poner en cuestión esa fórmula" de gobierno.
"Es una fórmula para el Gobierno vasco en base a un contexto político y en base a un programa de actuación en el propio Gobierno vasco, pero no es una fórmula consagrada para todo el conjunto del entramado institucional de la sociedad vasca", advirtió.
Sin embargo, recordó que el PNV marcó su "preferencia de reeditar esa fórmula de tripartito que existe en el Gobierno vasco en todo el conjunto institucional", frente a lo que EA y EB "han tenido una actitud no leal" con esa vocación de la formación jeltzale.
A pesar de esta situación, descartó que exista crisis dentro del Gobierno vasco, que mantiene "una apuesta por un programa de normalización política y de Gobierno del día a día de los ciudadanos vascos", aunque reconoció que "siempre hay necesidad de hacer esfuerzos de empastar" la actividad entre los tres partidos.
ELECCIONES AUTONOMICAS
Sobre la estrategia jeltzale de cara al escenario que se abrirá tras los resultados de las elecciones autonómicas, aseguró que no tienen "otra fórmula de trabajo" diferente a la colaboración con "aquellas formaciones políticas que tengan claras las premisas de respeto a todos los derechos humanos sin excepción y compromiso con el respeto a la voluntad de la sociedad vasca".
Urkullu añadió que Aralar también entra dentro las posibilidades de acuerdo para conformar el Gobierno vasco "en la medida en que ha formado coalición con EB y se abre otra posibilidad, otro escenario de juego", como "se ha visto en la conformación del Gobierno de la Diputación alavesa".
En cuanto a la posibilidad de un futuro "pacto de las fuerzas que se dicen progresistas" en Euskadi, como alternativa al actual tripartito del Gobierno vasco, señaló que sería "legítimo, igual que el PNV tiene legitimidad para una actuación libre respecto a otras formaciones políticas".
El portavoz del PNV también explicó que son "planteamientos ya conocidos" las declaraciones de dirigentes del PSE sobre que sería "viable" un nuevo marco estatutario para Euskadi si es "realista".
En este sentido, recordó que en el año 2005 el lehendakari, Juan José Ibarretxe, acudió a las Cortes Generales con un proyecto aprobado por mayoría absoluta en el Parlamento vasco, "una mayoría legal, legítima y democrática, pero el PSE ni lo admitió a trámite para su debate".
"Estamos en permanentes juegos retóricos, sea del PSE, del PSOE o de Batasuna, en cuanto a las formulaciones jurídicas, políticas, institucionales que afectan a la sociedad vasca. Son juegos retóricos que luego no se concretan en ningún procedimiento y mucho menos tienen por bandera el respeto a la decisión de los vascos y de las instituciones vascas", añadió.
Para solucionar esta situación, planteó la "necesidad de una revisión del marco de relaciones jurídico políticas entre Euskadi, la Navarra y el Estado español, para que haya un compromiso de los partidos constitucionalistas para llevar a las Cortes el acuerdo que se pueda alcanzar entre las formaciones políticas, y hacerlo respetar en las Cortes para trasladarlo al ordenamiento jurídico".
Preguntado por si Batasuna debería participar en esas negociaciones para definir un nuevo marco, indicó que la negociación previa entre las formaciones vascas tiene que hacerse "sin exclusiones, con cauce de expresión de todas las sensibilidades en la sociedad vasca", pero si hay compromiso de respeto a los derechos humanos sin excepción".
Urkullu señaló que "a partir de ahí, estamos planteando la necesidad de derogar esas políticas de excepción que existen en el Estado español que también están lastrando la normalización política, incluso el que Batasuna se pueda desnudar ante su propia gente, porque ha pasado el tiempo político de vivir bajo la tutela de ETA".
Por último, el portavoz jeltzale también aseguró, en referencia a la labor de la gestora que dirige Ondarroa (Bizkaia), que mantendrá su "apuesta por el diálogo y por mantener abierta la interlocución siempre desde las premisas del respeto y la apuesta positiva de la construcción de cada pueblo, cada territorio y la nación vasca".