MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Congreso, Jesús Posada, ha decidido encargar a los servicios de la Cámara una propuesta para tratar de zanjar las polémica surgida en torno al uso de sus salas para actos extraparlamentarios cuando se está celebrando el Pleno, según informaron a Europa Press fuentes parlamentarias.
Durante la reunión de la Junta de Portavoces, el PSOE y la Izquierda Plural han vuelto a mostrar este martes su malestar por que recientemente la Mesa del Congreso vetara sendas reuniones en dependencias parlamentarias coincidiendo con la sesión plenaria y que, sin embargo, no hiciera lo propio con una reunión que diversos grupos mantuvieron la semana pasada con la 'bloguera' cubana Yoani Sánchez, que precisamente fue organizada por el secretario cuarto de la Mesa, el diputado del PP Teófilo de Luis.
Se referían a la decisión unánime de la Mesa del Congreso de negar la utilización de una sala para la celebración de una reunión de IU con la consejera andaluza de Fomento y Vivienda, Elena Cortés. La misma respuesta recibió el PSOE al día siguiente ante la petición de un encuentro de sus diputados con organizaciones feministas para analizar la futura reforma de la Ley del Aborto.
Desde el PSOE culparon a la vicepresidenta primera de la Cámara, Celia Villalobos, pero ésta justificó la decisión recordando la imposibilidad de que durante las sesiones plenarias se celebrasen actividades de diputados o con personas ajenas a la Cámara en las dependencias comunes y con medios de comunicación presentes.
POSADA TUVO QUE AMONESTAR A SU SECRETARIO CUARTO
Pero no se habían apagado los ecos de las quejas de la oposición cuando un diputado del PP y precisamente miembro de la Mesa organizó, una semana después, la reunión con la bloguera cubana Yoani Sánchez, lo que acrecentó las protestas. La Izquierda Plural, a través de su portavoz parlamentario, José Luis Centella, anunció incluso que iba a elevar una queja formal al presidente por permitir según qué reuniones.
Los socialistas y la coalición de izquierdas denunciaron "una doble vara de medir" del órgano de gobierno de la Cámara, pero el presidente del Congreso negó que hubiera dos criterios de la Mesa sobre cómo actuar frente a estas cuestiones y se apresuró a amonestar verbalmente a De Luis por no cumplir las normas de la casa. "Las normas son para todos y todos tienen que cumplirlas", dijo entonces.
Este asunto ha vuelto a debate en la Junta de Portavoces y, pese a existir ya unos usos y costumbres a este respecto, el presidente de la Cámara ha visto necesario elaborar, en colaboración con los distintos grupos parlamentarios, una norma de utilización de las dependencias parlamentarias más alejadas del hemiciclo durante la celebración de los plenos.
