MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Congreso, Jesús Posada, ha reivindicado el legado de Adolfo Suárez, presidente del Gobierno en la Transición, y ha pedido a los partidos políticos de la actualidad "menos bronca y más acuerdos".
Posada, que empezó su carrera política como gobernador civil en Huelva a petición de Suárez, presidió este lunes en el Congreso la presentación de un monográfico de la revista "Cuenta y Razón" dedicado a la figura de quien fue presidente del Gobierno entre 1976 y 1981, los años del tránsito político de la dictadura a la actual democracia.
A su juicio, el legado de Suárez merece una "valoración extraordinariamente positiva" y se resume en pilares como la voluntad de concordia, la búsqueda del consenso y la mirada siempre hacia el futuro.
Para Posada, el fundador de aquella Unión de Centro Democrático (UCD) que gobernó España hasta 1982 personifica ya el espíritu de la Transición, pero cree que su espíritu no debe limitarse a aquella etapa histórica, sino que debe seguir acompañando a la clase política en su quehacer diario.
"Algo que creo que en estos momentos le gustaría al pueblo español es que tuviéramos ese espíritu de consenso entre los políticos, menos bronca y más acuerdos", ha resumido en declaraciones a los periodistas.
LUCHAR PARA MANTENER SU FANTÁSTICO LEGADO
En similares términos se pronunció el presidente del Consejo de Estado, José Manuel Romay Beccaría, quien avisó de que el "fantástico legado" dejado por Suárez no se conserva solo, sino que "hay que seguir luchando y ser vigilantes" para que sus ideas prevalezcan.
Marcelino Oreja Aguirre, quien fue ministro de Exteriores con Suárez y que actualmente preside la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, subrayó por su parte que Adolfo Suárez "será siempre, junto al Rey, el gran artífice de aquel cambio que ha permitido a España vivir en democracia todos estos años".
"Es el gran hacedor de la democracia", sostiene la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que a última hora no pudo asistir al homenaje pero sí dejó constancia del juicio que le merece la figura de Suárez.
Tampoco asistió Adolfo Suárez Illana, hijo del expresidente del Gobierno, quien alegó que la familia no participa en los homenajes para no dar la impresión de que se apropian de la figura de su padre.
Entre el público se pudo ver a antiguos compañeros de generación de Suárez, pero también políticos actuales como Gaspar Llamazares, de Izquierda Unida.
