El PP critica al Gobierno por no acudir a una manifestación "cívica y de buena fe"

Actualizado: lunes, 5 febrero 2007 1:01


MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

La manifestación del sábado vuelvió a enfrentar, un día después, al PSOE y al PP. Los socialistas acusaron a los 'populares' de organizar un acto de protesta contra el Gobierno, apropiándose de símbolos nacionales como el himno o la bandera. Sin embargo, la versión desde Génova es radicalmente diferente. El PP insiste en que la concentración fue "inmensa, cívica y plural" por lo que pide al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que "escuche la voz de la calle" en una manifestación en la que "sólo faltó el Gobierno".

El Partido Popular mostró ayer su satisfacción por el resultado de la manifestación celebrada el sábado en Madrid que en su opinión demuestra que el espíritu de Ermua "sigue vivo". El secretario general del PP, Ángel Acebes, afirmó que la concentración, en la que "sólo faltó el Gobierno", fue "ejemplar, inmensa, cívica y plural de ciudadanos de buena fe".

El secretario general del PP destacó la "claridad" del mensaje de la manifestación en un momento de "enorme confusión", ya que los ciudadanos que se movilizaron pidieron al Gobierno que rectifique y que vuelva a la política unitaria de derrotar a ETA "sin ningún tipo de negociación".

"Ayer se demostró que somos una gran nación que no va a ceder ante la presión y el chantaje de los etarras, lo que da una gran inyección de esperanza y de confianza en el futuro", señaló Acebes, quien consideró por ello que Rodríguez Zapatero "haría muy bien" en oír la "voz de la calle", que no quiere "resignarse" a la presión y chantaje de ETA, sino que quiere derrotarla sin que haya ninguna negociación. "Si Zapatero no quiere oír el mensaje, se equivoca", reiteró Acebes.

En la misma línea, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, destacó el "extraordinario éxito" de la protesta y ha asegurado que no fue "ni contra el Gobierno ni contra el PSOE" sino contra el "terrorismo y los que quieran negociar". Durante una visita a Baena (Córdoba), en la tercera jornada de la campaña sobre el referéndum andaluz, Arenas subrayó que fue una de las protestas "más importantes de la historia" de la democracia, que muestra el "espíritu" de la sociedad española en este asunto.

UTILIZACIÓN PARTIDISTA

Pero desde el Partido Socialista no se opina lo mismo y se acusa a los populares de una utilización partidista de la manifestación. El PSOE asegura que los lemas de numerosas pancartas y algunas de las consignas que se corearon durante la marcha muestran que se trató de una nueva manifestación contra el Gobierno y no contra la banda terrorista ETA".

El portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Diego López Garrido, aseguró que "no hay precedentes" en la historia de la democracia española de que una manifestación de estas características concluya con el himno nacional. Por tanto, subrayó que "claramente el objetivo era su uso partidario y sectario, algo propio de actitudes autoritarias".

El portavoz socialista reclamó que no se produzca este "constante intento" de "apropiación privada", algo que "significa el intento de exclusión de mucha gente, de símbolos que pertenecen a todos". Además, recordó que el uso del himno nacional en la manifestación de ayer se hizo "contraviniendo el espíritu de una norma dictada por el Gobierno Aznar en 1997 sobre utilización del himno nacional". Esta ley señala que procede usar el himno en actos con presencia del Rey, del presidente del Gobierno, en determinadas manifestaciones deportivas o en momentos en los que se representase "la unidad de todos".

López Garrido afirmó que al PSOE la hubiera "encantado" que el único grito fuera contra ETA, como ocurrió en la del 13 de enero, "pero no fue así". A su juicio, la manifestación fue contra el Gobierno y se vio "claramente" que el PP, "que hay que suponer que está por el fin del terrorismo", no lo considera a pesar de eso una prioridad, puesto que "por encima de eso está acabar con el Gobierno, y ese fue el sentido de la manifestación".

UNIÓN DE LOS DEMOCRATAS

El portavoz socialista afirmó que la estrategia anti terrorista del Gobierno es "absolutamente certera y adecuada", por lo que quien debe cambiar es el PP, cuya estrategia es "un callejón sin salida". Por eso, pidió a los populares que, como partido demócrata, se unan al resto de los demócratas, puesto que es "mucho más lo que nos une que lo que nos separa en relación al terrorismo".

En este sentido, subrayó que el Gobierno ha dejado "muy claro que con violencia no cabe el diálogo", por lo que el proceso de paz "se ha terminado", ya que el "embrión de diálogo lo rompió ETA" con el atentado de Barajas, cuando "puso de manifiesto que no tenía intención de abandonar la violencia".

Además, añadió que no hay ninguna razón para que el PP utilice "supuestas e inexistentes negociaciones y diálogos", o que "presuma" que esto está teniendo lugar, para su estrategia "partidista". Según López Garrido, lo que cuentan son los hechos, y "otra cosa es lanzar presunciones temerarias e irresponsables que sólo benefician a ETA".