Asegura que a la Cámara no le corresponde debatir ni someter a votación las sentencias, sino "sólo cumplirlas"
BILBAO, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PP vasco, Leopoldo Barreda, denunció hoy "la pretensión nacionalista de estar por encima de la Ley", tal como, a su juicio, se refleja en las declaraciones del presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, al afirmar que el Parlamento debe actuar como lo hizo en 2003 el ex presidente de la Cámara, Juan María Atutxa, si se le ordena disolver Ezker Abertzalea, grupo parlamentario de EHAK.
Barreda aseguró que a la Cámara no le corresponde debatir ni someter a votación las sentencias, sino "sólo cumplirlas".
En un comunicado, el dirigente popular afirmó que Urkullu "pretende la apropiación partidista de las instituciones vascas" y señaló que ello se debe a que el PNV cree que sus cargos "están por encima de la Ley".
El portavoz del PP vasco advirtió al líder jeltzale, que habla de la soberanía de la Cámara, de que "soberano únicamente es el conjunto del pueblo español". "Cada uno de los ciudadanos y cada actuación de los poderes públicos están sometidos al control de los tribunales y es, por tanto, a los jueces a quienes corresponde juzgar y hacer cumplir lo juzgado", recordó en referencia a la condena del Tribunal Supremo a Atutxa y a los ex miembros de la mesa del Parlamento, Gorka Knör y Kontxi Bilbao.
Para el portavoz popular, "toda la argumentación de los nacionalistas se basa en dos falsedades", ya que, según indicó, piensan que sus cargos públicos "están por encima de la Ley" y creen que la disolución del "grupo parlamentario de Batasuna debe recaer en el Parlamento vasco".
"Hay que recordarle al señor Urkullu que el Parlamento no tiene, ni debe tener, capacidad para disolver ningún grupo. En la época de Atutxa, el grupo de Batasuna quedó disuelto por decisión del Tribunal Supremo y a la Cámara vasca sólo le corresponde aplicar las consecuencias administrativas de una resolución judicial firme", remarcó.
En este sentido, aseguró que al Parlamento no le corresponde debatir, ni someter a votación las sentencias, "sólo cumplirlas, de manera que, si el Tribunal Supremo acuerda disolver a EHAK, la obligación de ejecutar la sentencia seguirá correspondiendo a la Mesa", ya que es "totalmente ridículo que se quiera que el pleno decida si disuelve o no lo que ya estará disuelto para esas fechas".
De esta forma, se refirió a la iniciativa planteada en la Cámara por los partidos del tripartito y Aralar para que se reforme el reglamento y sea el pleno el órgano que decida sobre la disolución de grupos parlamentarios.
IZASKUN BILBAO.
En este sentido, manifestó que la actual presidenta del Parlamento, Izaskun Bilbao, tendrá la misma responsabilidad en esto que Atutxa. En su opinión, la reforma reglamentaria que pretende el tripartito "no es más que una reedición del intento de transferir la responsabilidad a los portavoces de los grupos parlamentarios, la misma maniobra que tendrá las mismas consecuencias" que en el 'caso Atutxa'.
"Haría bien el señor Urkullu en tomar buena nota de los términos de la sentencia y no pretender que, de nuevo, los miembros de la Mesa carguen con la responsabilidad de incumplir las resoluciones judiciales por la pretensión nacionalista de estar por encima de la Ley", reiteró.
Leopoldo Barreda criticó que "ha costado años recuperar el prestigio" del Parlamento tras el 'caso Atutxa', por lo que los vascos tienen "derecho a exigir al PNV y sus socios respeto" por las instituciones.
"Por otro lado, la única vergüenza que debe dar es la de los dirigentes que confunden el partido con las instituciones, lo vasco con lo nacionalista, la defensa de intereses partidistas con el interés general de la sociedad vasca y todo ello para acabar en lo de siempre, dar cobertura a ETA-Batasuna y permitir que se refugie en nuestras instituciones", concluyó.
