Ve una "excusa" alegar la unidad de la colección para no entregar las obras
LÉRIDA, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, subrayó hoy que la catalogación de las obras de arte sacro que el Obispado de Barbastro-Monzón reclama al de Lérida no condiciona su propiedad, y vio una "excusa" que Cataluña alegue que no se debe romper la unidad de la colección.
En declaraciones a Catalunya Ràdio recogidas por Europa Press, comparó esta situación con la de los 'papeles' de Salamanca: "Imagine que no se hubiesen podido traer aquí (a Cataluña) los 'papeles' de Salamanca porque estuvieran catalogados en un museo determinado de Salamanca".
Para Iglesias, que una obra esté catalogada "no condiciona en absoluto quién es el propietario", y subrayó que no hay ninguna ley que cambie la propiedad de una obra porque esté catalogada en un museo determinado. Es más, indicó que los aragoneses y también los catalanes tienen en sus catálogos obras que están en Estados Unidos.
Remarcó que es "difícil de defender" que la imagen de la obra de Zaidín (Aragón) esté en el Museo de Lérida. "Los de Lérida dicen que no se puede romper la colección. Todo eso son excusas", indicó.
Subrayó, además, que las obras en litigio representan sólo el 5 por ciento de toda la colección del Museo de Lérida, que tiene más de 2.000 obras, "y no son las más importantes".
El presidente de Aragón pidió ser consecuentes con lo que los tribunales de la Iglesia han dictaminado, y dijo no entender por qué no se hace caso si los propios obispos ya están de acuerdo. Lo que no se ha producido, según él, es la "voluntad" del obispo de Barbastro-Monzón de ir a exigir el cumplimiento de la sentencia, pues lo considera "violento"
Iglesias advirtió de que si los eclesiásticos no hicieran caso de las sentencias de la Iglesia y desautorizaran a sus propios tribunales, estarían "poniendo en cuestión el propio Concordato" entre España y la Santa Sede, lo cual sería, a su juicio, "muy grave".
Por ello, pidió tener "sentido común" y ayudar a los obispos a que este asunto deje de ser una "piedra que dificulta la buena relación entre catalanes y aragoneses". Aseguró que ya ha hablado de ello con el presidente de la Generalitat, el también socialista José Montilla, para desatascar el problema, un conflicto que, según él, no debería existir, pues las obras son propiedad de la Iglesia, y ésta tiene una única personalidad jurídica y unos tribunales específicos reconocidos en la Constitución y en el Concordato.
El conflicto entre los dos obispados se inició en 1995 con la segregación de 111 parroquias oscenses de la Diócesis de Lérida y su agregación a la de Barbastro, que pasó a denominarse Barbastro-Monzón y comenzó a reclamar las obras al Obispado leridano.
Hasta ahora, todos los pronunciamientos de la Iglesia han sido favorables a Aragón. El último fue el del Tribunal de la Rota que en mayo no admitió a trámite el recurso del Obispado de Lérida, en el que pedía que se juzgara la propiedad de las obras.
Este rechazo de la Rota a examinar los documentos del Obispado de Lérida animó a la Associació d'Amics del Museu Diocesà a presentar la demanda civil en los juzgados de Lérida para que sea la justicia quien se pronuncie sobre la propiedad de unas 80 piezas de las 113 que reclama la diócesis aragonesa a la de Lérida. Las otras 20 las tiene el Obispado de Lérida en depósito.
