El PSC advierte de que "el PP puede ganar" y llama a movilizar a la izquierda contra "el radicalismo estéril"

Actualizado: lunes, 8 octubre 2007 17:49

BARCELONA, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

El secretario de Organización del PSC, José Zaragoza, alertó hoy de que "el PP puede ganar" las elecciones generales de marzo, según lo que revelan las encuestas publicadas este fin de semana, e instó a los catalanes a "elegir entre la política de pacto y diálogo" del Gobierno del PSOE "o el regreso a la política de la confrontación" y del "radicalismo estéril" que, en su opinión, representa el PP.

Zaragoza consideró que "los sectores de la derecha están más movilizados" de cara a las próximas elecciones, mientras que "los de la izquierda se lo están pensando".

En este sentido, Zaragoza remarcó que los actos violentos como las quemas de banderas y de fotos de los Reyes sucedidos en Catalunya "son muy minoritarios" y advirtió de que "el juego del extremismo sólo favorece a quien tiene políticas radicales, como el PP".

Zaragoza acusó a los populares de estar "convirtiendo a sectores minoritarios en emblema" de toda la sociedad catalana para "azuzar el extremismo y movilizar a los sectores más conservadores de la sociedad".

Zaragoza advirtió así de que las generales "dependerán del voto de los sectores más moderados, que están menos movilizados". Así, abogó por que éstos planten cara "a una derecha que juega al extremismo", tanto en el caso del PP como en el de CiU, a la que atribuyó también una "radicalización del discurso" que la lleva a "no decir nada" cuando ayuntamientos gobernados por la federación nacionalista aprueban retirar la fotografía del Rey de la sala de plenos, como sucedió en Berga (Barcelona), aunque el PSC se abstuvo.

El dirigente del PSC remarcó que incidentes como las quemas de fotos forman parte de "una espiral que se alimenta", convencido de que "cuantas más portadas se hacen de ello, más fotos se queman", y, en este sentido, criticó que incluso los "medios públicos catalanes" se hayan sumado a ello "haciendo conexiones en directo con actos en los que participan 40 personas". "Esto sólo ayuda a alimentar los extremos", advirtió.

Zaragoza denunció la "estrategia del PP" como la de la "deformación de la realidad y la mentira" y aseguró que su discurso "no va contra ERC, sino que va contra Catalunya y contra el Gobierno catalán", y puso como ejemplos sus posicionamientos respecto al AVE y respecto a los 'papeles' de Salamanca.

Zaragoza advirtió de que "un gobierno del PP en España sería un desastre para Catalunya, y para el Govern también", porque se entraría "en la espiral de confrontación que alimentaría a los sectores más radicales del país". "Sería cortar de raíz lo que hemos conseguido", afirmó Zaragoza, señalando al PP como "el partido que juega más sucio" con recursos ante el Tribunal Constitucional (TC) y que "calienta el discurso de la catalanofobia en Salamanca" e intenta la "confrontación territorial con Andalucía, diciendo que los catalanes les quitan el dinero a los andaluces".

Asimismo, Zaragoza reprochó al presidente del patronato de la Sagrada Familia, Joan Rigol, que la semana pasada "le diera una plataforma" al presidente del PP, Mariano Rajoy, para "expresar su anticatalanismo", justo antes de que fuera a Salamanca "a posicionarse contra la devolución de los 'papeles'" a Catalunya. Consideró irónicamente "curioso" que "la única propuesta de José María Aznar que Rajoy quiere rectificar sea el trazado del AVE", algo que, dijo "perjudica a la ciudad de Barcelona".

Por contra, Zaragoza apostó por que el PSC se vuelque en "la visualización de las políticas claras" del Gobierno y en "hablar claro de lo que la gente se juega en estas elecciones". "Hay que decirle a la gente que su voto decidirá y que tienen que valorar si nos conviene más el camino del radicalismo estéril y la quema de banderas", que, en su opinión, fomenta el PP, "o el camino del acuerdo y el diálogo" que identificó con el PSOE.

Zaragoza reconoció que la "fallida de los servicios públicos" en Catalunya puede dar a los ciudadanos "la sensación de que el Estado no funciona" y restar voto a los partidos con responsabilidades de gobierno, pero remarcó que "la gente se ha acostumbrado también a tener unos gobiernos sensibles con sus problemas, que plantean medidas para solucionarlos, y se olvidan de cómo eran aquellos gobiernos que ignoraban los problemas", en alusión a los de CiU y PP.

El dirigente del PSC consideró que la respuesta a los incidentes en las infraestructuras ha de ser "medidas concretas" y "no propuestas de autodeterminación", e insistió en que los últimos gobiernos de CiU, con Artur Mas y Xavier Trias en ellos, "no dijeron nada de las infraestructuras, dejaron que se pudriera y es ahora cuando se afronta" el problema de mantenimiento de las Cercanías de Renfe en Catalunya.