BARCELONA 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario general adjunto de CDC, Felip Puig, defendió hoy potenciar al máximo la alianza Galeuscat en el Congreso y en el Senado, pero también en la Unión Europea (UE), después de los resultados electorales en Euskadi y Galicia, donde BNG y PNV quedarán previsiblemente fuera de los gobiernos.
En una entrevista de Europa Press, Puig subrayó que el PSOE está "cerrando la transición española definitivamente" con las decisiones estratégicas que está tomando en Cataluña y en Euskadi, dando por cerrado un ciclo de un "supuesto respeto a la realidad plurinacional" de España. Todo ello con la colaboración del PP.
Remarcó que Galeuscat debe contraponer su modelo al que defiende la sociedad española, que "parece obsesionada con ir hacia un Estado centralista y homogéneo", olvidándose del espíritu confederal por el que apuestan los nacionalismos.
Ante esta situación, abogó por iniciar una nueva etapa política, por lo que pidió una "reflexión a fondo" a nacionalistas vascos y catalanes sobre qué estrategia seguir en el futuro.
En su opinión, esta estrategia debería pasar por replantear prácticas llevadas a cabo en los últimos 30 años por parte de vascos y catalanes, optando a partir de ahora por el multilateralismo en cuestiones como la política internacional, el respeto a la plurinacionalidad, la reforma de leyes orgánicas, la legislación electoral, las infraestructuras de carácter general y las políticas energéticas.
Aun así, apuntó que habría algunos aspectos de relación bilateral entre cada nación y el Estado, pero gran parte de las decisiones serían fruto de una mayor complicidad y coordinación de los grupos en Congreso y Senado. "Con independencia de la decisión sobre las europeas, estoy convencido de que Galeuscat tiene un futuro renovado y más apasionante", argumentó.
Esta "remontada nacionalista", según él, tendría su punto de inflexión en Cataluña, pues el nacionalismo catalán, que estaba en peor situación a priori antes de las elecciones vascas y gallegas, es ahora clave en la recuperación. "La resistencia del nacionalismo que llaman periférico pasa por la fortaleza de CiU", aseguró.
En cuanto a la conveniencia de que Galeuscat se presente unida a las elecciones europeas, Puig siempre se ha mostrado partidario, pero ahora aún más, pues la coordinación entre los nacionalismos es ahora "más oportuna".
"Tenemos que aprovechar todos los momentos, escenarios y oportunidades, y unas elecciones son una oportunidad para mostrar que hay una manera diferente de entender España", señaló Puig, que subrayó que, tras las elecciones vascas y gallegas, la decisión sobre Europa "tiene ahora un nuevo escenario".
De todas maneras, dejó claro que esta decisión está aún por ver, pues CDC y UDC deben tomarla de forma consensuada. Además, explicó que PNV y BNG han pedido de momento una "prórroga" a sus socios de Galeuscat para resituarse internamente tras las elecciones, en el caso del BNG, y para agotar las pocas esperanzas que tiene el PNV de gobernar Euskadi.
Precisamente, después de unos comicios que revalorizan el papel de CiU en el Congreso, Puig consideró que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "ha amortizado definitivamente el poco crédito político que le quedaba y no es capaz de reaccionar desde el punto de vista del estadista que necesita España".
"Podemos decirlo más alto pero no más claro: que no nos busquen porque no nos encontrarán", indicó Puig, descartando de todas un apoyo permanente de la federación al PSOE y a Zapatero, en quien no vio las cualidades necesarias, "la convicción democrática y la visión de respeto plurinacional" que CiU exige a los gobernantes españoles.