La revista de Guerra avisa de que la petición de CCAA ricas de inversión en función del PIB agudizará la desigualdad

Dice que, frente a modelos autonómicos que cuestionan los criterios solidarios, la izquierda debe reivindicar los de cohesión territorial

Europa Press Nacional
Actualizado: jueves, 9 agosto 2007 15:54

MADRID, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -

La revista 'Temas' publica en su último número un editorial en el que alerta de que la petición de las comunidades autónomas más ricas de que la inversión se efectúe en función del Producto Interior Bruto (PIB), entre ellas Cataluña, agudizará la desigualdad entre las diferentes regiones españolas como consecuencia de "crecimientos más desajustados".

El editorial de la revista cuyo Consejo de Redacción está presidido por el socialista Alfonso Guerra, titulado 'La cohesión social y territorial de España', señala que esta circunstancia, unida "al parón" de los fondos de cohesión europeos, aumentará previsiblemente las desigualdades "entre las dos Españas de la desigualdad y el bienestar social".

En este sentido, señala que en España se están apuntando tendencias regresivas "y perspectivas inquietantes de cara al futuro" en cohesión social. Además, considera que es en el plano interterritorial donde las perspectivas de retrocesos se apuntan "con mayor crudeza" debido al final de los beneficios de los fondos europeos y el desarrollo de unos modelos autonómicos "que cuestionan los criterios redistributivos y solidarios en la asignación de recursos y cargas fiscales".

COMUNIDADES SOBRE LA MEDIA EUROPEA Y EXTREMADURA 30 PUNTOS POR DEBAJO

Además, argumenta que la convergencia que España está alcanzando con el resto de la Unión Europea "no debe ocultar" que, mientras siete comunidades se encuentran por encima de la media europea, Extremadura se sitúa más de 30 puntos por debajo. A su juicio, "el problema" es que desde 1999 el diferencial de renta se ha ampliado en algunas comunidades, como es el caso de Extremadura y Madrid "que han experimentado un aumento de la diferencia de renta de 6,7 por ciento".

"En estos momentos, siete comunidades se encuentran se encuentran por encima de la media europea: Madrid, Navarra, País Vasco, Cataluña, Baleares y, en menor grado, La Rioja y Aragón; mientras, Extremadura se sitúa más de 30 puntos por debajo, Andalucía y Castilla-La Mancha veinte puntos por debajo y Galicia y Murcia 15 puntos", explica.

Otro ejemplo que expone es que, mientras en Navarra se cuenta con 557,5 médicos por 10.000 habitantes, en Castilla-La Mancha sólo hay 341,3 y en Andalucía 398,5. Además, en Cataluña se dispone de 46,3 camas hospitalarias por 10.000 habitantes cuando, por el contrario, Castilla-La Mancha cuenta con 28,6 o Andalucía 29,5.

En este contexto, subraya que "la persistencia de notables desigualdades territoriales y las perspectivas de su agudización" deben hacernos tomar conciencia de que la lucha por una mayor igualdad social "tiene una importante proyección interterritorial". Según el editorial, el objetivo de la cohesión social debe situarse así en una perspectiva "más amplia" de comprensión del problema de las desigualdades que debe ubicar las políticas sociales "en un marco distributivo más complejo".

POLÍTICAS DE COMPENSACIÓN ADMINISTRADAS POR EL GOBIERNO

Así, alerta de que si el crecimiento regional español "se deja al libre juego de las fuerzas del mercado" sin elementos de compensación y reequilibrio "se evolucionará hacia un modelo crecientemente dualizado" que favorecerá un mayor crecimiento en las zonas más ricas y un desarrollo más lento en las menos favorecidas. "Por ello, es necesario potenciar las políticas de cohesión territorial", argumenta.

En este sentido, defiende la necesidad de políticas de compensación con recursos presupuestarios suficientes y que sean administradas por el Gobierno "con criterios de cohesión social, redistribución y equilibrio". Según defiende, la izquierda debe reivindicar los criterios de cohesión territorial como parte central "del ideario solidario" y teniendo en cuenta que las desigualdades territoriales constituyen "uno de los elementos primordiales de la desigualdad".

A su juicio, estas políticas deberían aplicarse, al menos, por razones de "egoísmo o interés inteligente" si no se hace siguiendo criterios de solidaridad y sentido de la equidad. "Si los españoles, que nos hemos beneficiado de este criterio político, no lo continuamos aplicando en los próximos años, no sólo caeremos en una contradicción inexplicable hacia el exterior, sino que estaremos desaprovechando una parte de nuestros potenciales futuros de crecimiento", concluye.

Contenido patrocinado