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MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, denunció hoy la "afluencia masiva" de inmigrantes irregulares en las costas canarias y pidió una mayor seguridad ya que, argumentó, "el ritmo actual de crecimiento de la población en Canarias es sencillamente insostenible" y podría "amenazar" la prestación de servicios públicos esenciales e, incluso, al mercado laboral.
Rivero, que realizó estas afirmaciones en el curso de una conferencia pronunciada en el Club Siglo XXI de Madrid, recalcó que "no hay un presupuesto público capaz de dar respuesta a un crecimiento tan importante de la demanda de servicios".
Acusó al Estado de "sordera" y "miopía" ante el problema que provoca un "excesivo consumo de recursos naturales, un alarmante deterioro medioambiental y paisajístico y el desbordamiento de la capacidad de las infraestructuras y servicios públicos, que ya sería razón suficiente", aunque recalcó también los peligros que podrían llegar también al mercado laboral.
"Defender la necesidad de ordenar el proceso poblacional --dijo-- no es xenofobia -término que algunos utilizan con excesiva alegría-. Tampoco es un discurso de exclusión. Nada más lejos de la realidad. Canarias es una realidad integradora que considera inaplazable ordenar su crecimiento poblacional. Un planteamiento que nada tiene que ver con la xenofobia y sí, y mucho, con la responsabilidad".
Quiso destacar que Canarias no sólo recibe a inmigrantes por puertos y aeropuertos, sino que "los canarios miramos al mar y el mar con frecuencia arroja en nuestros brazos miles y miles de personas que, víctimas de la desesperanza, embarcan en ataúdes flotantes hacia un futuro incierto que, en el peor de los casos, da con sus cuerpos en el fondo del océano".
Pidió una política "que invierta más y mejor en la seguridad de nuestras aguas", desde los ámbitos estatal y europeo, "que apueste, de verdad, por la cooperación al desarrollo. Una política que cree economías en los países de origen de la inmigración". Esta política debería incluir también un compromiso de los gobiernos africanos en la lucha contra las mafias".
ESTATUTO CANARIO
Lamentó que al Estatuto canario se le haya dado "con las puertas del partidismo en las narices. No estamos inventando nada. Tampoco estamos aspirando a nada que no sea garantizar a las futuras generaciones de canarios que puedan crecer, trabajar, soñar y también morir en las Islas en las mismas condiciones, como mínimo, que los ciudadanos que viven en el continente europeo al que estamos vinculados".
Consideró que la UE sí ha entendido la problemática de Canarias pero que, en cambio, no "ha sido del todo entendida y asumida por los distintos gobiernos de España, y eso a pesar de haber tenido más de cinco siglos para comprender nuestra realidad insular y lejana".
Expresó su "alarma" por que no se emprenda "una reforma valiente y transparente de la Constitución del 78, y, sobre todo, que se haya optado por una revisión por piezas; adecuando la realidad a cada una de las piezas sin otro criterio que las urgencias electorales a las que he aludido".
Tampoco entiende que "el mismo Estado que se desentiende de los menores inmigrantes ilegales que llegan cada día a nuestras costas -que desbordan la capacidad de atención de la Administración canaria- se atribuya, eso sí, la plena responsabilidad de las aguas interiores canarias o las posibles autorizaciones para prospecciones petrolíferas en la vecindad del Archipiélago".
CONTROL DE FRONTERAS
En cuanto al control de las fronteras apuntó que "en el sur, en Canarias, se han convertido en una mera denominación sin efectos prácticos. Cuando decenas de inmigrantes alcanzan territorio insular sin ser detectados, el concepto de frontera decae, convirtiéndose tamaña vulnerabilidad en un reclamo no sólo para quienes trafican con la desesperanza de los africanos".
Además, reclamó el control de aguas, una mayor capacidad de maniobra en el comercio exterior, la gestión de puertos y aeropuertos y del servicio aéreo interinsular. Se preguntó también si "¿es o no relevante que los canarios tengamos un Estatuto que atienda a estos y otros problemas del siglo XXI?"
Por otro lado, denunció la inversión española en Africa y, aunque aseguró que no están en contra del desarrollo de los países vecinos del norte de Africa, sí dijo que "Canarias tiene que estar presente en el conocimiento de estas acciones estratégicas, y, en este orden de cosas, los canarios reclamamos estar presentes en las reuniones con los países vecinos".
REFORMA "ENCUBIERTA" DEL MODELO DE ESTADO
"La realidad --añadió-- es que los interlocutores únicos de un diálogo al que asistimos los restantes pueblos del Estado como meros espectadores son Madrid, Vitoria y Barcelona". Habló de "reforma encubierta del modelo de Estado" y señaló que "sobre ese eje pivota la discusión política y estatutaria".
En el terreno político, puso de relieve que "sólo existen dos posiciones encontradas, la del Partido Socialista Obrero Español y la del Partido Popular -con el que CC gobierna en Canarias--, uno defendiendo que es viable tratar la asimetría política sobre la base de reformar de forma puntual cada uno de los casos nacionales y otro argumentando que eso es producto del 'secuestro político' que catalanes y vascos han hecho de José Luis Rodríguez Zapatero".
Se preguntó también "¿qué puede sentir un vecino de León, Badajoz o Gijón cuando cae en la cuenta de que él no está en el debate sobre el modelo de financiación?".
Aclaró que no están dispuestos a llevarse de nuevo a las islas su estatuto de autonomía, mientras "otros siguen luchando para alcanzar los mismos techos de autogobierno que Cataluña. Otros lanzan el órdago de un referéndum. Y mientras, crece por toda España la sensación, la preocupante sensación, de la pérdida de la capacidad de consenso, la sensación de una crispación que brote a brote, palabra a palabra, gesto a gesto, desde la quema de fotografías del Rey a las soflamas segregacionistas, está alcanzando cotas jamás vividas tras el milagro de la transición española".
Así, animó al resto de comunidades y a los actores sociales a que se pregunten "si es o no verdad que el modelo de Estado está siendo alterado unilateralmente".