Afirma que las Comunidades pueden tener "hechos diferenciales pero no privilegios" y admite haber sido "un autonomista toda la vida"
SAN LORENZO DE EL ESCORIAL, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Senado, Javier Rojo, expresó hoy su deseo de que Zapatero y Rajoy aborden durante el encuentro que mantendrán el próximo miércoles la reforma del Senado, con el fin de convertir a la Cámara Territorial en un "paraguas que proteja y respeta" a todas las Comunidades Autónomas, tanto en las "diferencias como en las uniones".
"En una reforma constitucional ya no valen los discursos sino las responsabilidades", recalcó Rojo durante los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid, celebrados en San Lorenzo de El Escorial, donde participó en las jornadas 'La Constitución 30 años después'.
En primer lugar, el presidente de la Cámara Alta realizó un recorrido por la historia democrática de España, en el que subrayó el camino de "dificultades y recelos" que inició el país, y en el que hubo que ir sumando distintas "voluntades" y primando así la búsqueda del consenso. Definió a la España de mitad de la década de los 70, como un país "de grandes discursos" y donde "muchas veces la pasión nos cargaba más que la inteligencia".
"Había grandes discursos sobre España y pocos sobre españoles", indicó, para poner de relieve el valor de la palabra 'españoles' por todos los derechos y obligaciones que trae consigo, y que refleja la Constitución. Durante el periodo de 1978 y 1980, criticó, se acusó al Gobierno socialista de "romper" el país al impulsar el Estado de las Autonomías.
AGREDIDO COMO ESPAÑOL Y VASCO
En este punto, admitió sentirse orgulloso tanto de su condición de español como de su nexo a las tierras vascas - Rojo fue candidato socialista a la Diputación Foral de Álava para las elecciones del 25 de mayo de 2003-. Sin embargo, reconoció haberse sentido "agredido en Madrid como vasco, y en Euskadi como español".
A renglón seguido, el dirigente socialista hizo hincapié en que "España no resta a ninguna de las Comunidades Autónomas", y agregó que, por contra, otorga "un plus de identidad". En esta línea, indicó la apuesta del Gobierno por fomentar la igualdad entre las regiones, aunque, en su opinión, haya todavía "diferencias entre el norte y el sur, el este y el oeste". De esta forma, resumió que la descentralización ha significado un acierto para el Estado.
Por ello, defendió la existencia de un lugar "de cooperación y entendimiento" entre las Comunidades capaz de establecer acuerdos y de entender también los desacuerdos. En este punto, citó el ejemplo de Expo Zaragoza 2008 como un "éxito para el conjunto de españoles y no sólo para el beneficio de Aragón".
A su juicio, las reformas constitucionales equivalen a un signo de "responsabilidad política" y no se limitan al beneficio de un político o del acuerdo de los partidos. "No es un capricho del presidente de una cámara o de un presidente autonómico", estimó.
OTRAS COMUNIDADES TAMBIÉN SON "NACIONALISTAS"
Rojo también reconoció haber sido "un autonomista toda la vida" y abogó por que las Comunidades puedan tener "hechos diferenciales" pero en ningún caso privilegios. Además, calificó al Senado como una Cámara "útil", aunque señaló que "puede serlo mucho más". "Si no existiese habría que inventarla", agregó.
Durante su intervención, también se preguntó: "¿No hay competencias nacionalistas en cada Comunidad Autónoma cuando tienen que defender lo propio?". Tras ello, respondió que "el problema", en su opinión, "es que no se llaman nacionalistas". "Pero escucho cosas y se diferencian muy poco de lo que ocurre en mi Comunidad", concluyó, en referencia al País Vasco.
En cuanto al enconado debate autonómico, sobre el agua y financiación, también lamentó que, en ocasiones, las descalificaciones que ha habido entre las distintas Comunidades "hayan sido mayores que las que ha tenido España con otros países extranjeros".
