LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 22 May. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, atribuyó hoy a problemas de agenda para no reunirse con el presidente del Ejecutivo canario, Paulino Rivero, para tratar asuntos entre el Estado y Canarias, a pesar de estar en las islas para el acto de toma de posesión de la nueva delegada del Gobierno en Canarias, Carolina Darias.
Salgado dijo en declaraciones a Europa Press que en esta ocasión no ha sido posible sentarse con Rivero por problemas de agenda de ambos. "En esta visita no nos sentaremos porque el presidente del Gobierno de Canarias tiene obligaciones y yo también en Madrid", indicó.
Ante una nutrida representación política de las islas, Salgado evitó tras la toma de posesión de Darias concretar una fecha para el encuentro con el presidente regional. "Tendrá lugar en algún momento. Me he comprometido y lo haré", explicó la ministra.
En el acto tomaron parte el propio Rivero, la consejera de Bienestar Social, Juventud y Vivienda del Gobierno de Canarias, Inés Rojas; el vicepresidente del Parlamento de Canarias, Juan Carlos Alemán; el líder del PSOE en Canarias, Juan Fernando López Aguilar; el presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Pérez; el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Jerónimo Saavedra; la presidenta del PP en Tenerife, Cristina Tavío; el diputado socialista, Blas Trujillo; el portavoz del PP en el Cabildo de Gran Canaria, Larry Álvarez; la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Pepa Luzardo o el exdelegado del Gobierno en Canarias, Salvador García, entre otros.
"DISENTIMIENTOS PERO CON DIÁLOGO".
Además, Salgado aprovechó su discurso en la toma de posesión de Darias para indicar que existe un "ambiente de cooperación" en todos los temas entre Gobierno central y regional canario y explicó que es normal que, "durante el largo camino", se produzcan "desencuentros" entre las dos administraciones.
En este sentido, dijo confiar en que estos problemas no "impidan" el poder colaborar y tener los ojos puestos en los ciudadanos y ciudadanas de Canarias, puesto que son el objeto de la acción política. "Podrá haber disentimientos pero siempre en un marco franco de diálogo", dijo.