Actualizado: jueves, 9 agosto 2007 14:21


PAMPLONA, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -

Miguel Sanz, candidato de UPN a la presidencia del Ejecutivo foral, presentó hoy en el Parlamento de Navarra su programa de gobierno, primer trámite de un calendario que concluirá el próximo sábado con su investidura. El próximo jefe del Ejecutivo hizo un nuevo llamamiento al PSN para trabajar "juntos por el interés general de Navarra" y les brindó concretamente la oportunidad de colaborar en materia de Bienestar Social.

También quiso dejar claro que no toda la responsabilidad de lo que suceda en la legislatura, en la que reconoce que asume riesgos, recaerá en su persona y advirtió de que ejercerá la capacidad de convocar elecciones anticipadas si la comunidad foral "se hace ingobernable".

Sanz afirmó que su programa es el que "más fielmente responde a la voluntad de los ciudadanos". Según defendió, éstos no votaron en mayo en términos de formaciones de izquierdas o derechas, puesto que en Nafarroa Bai se integran partidos de corte "conservador", en referencia al PNV, y otros de "ideología radical".

Según apuntó, los ciudadanos depositaron su confianza en fuerzas constitucionalistas, en un 76 por ciento. "El 72 por ciento, representado por UPN, CDN y PSN hemos acordado garantizar la gobernabilidad y la estabilidad institucional de Navarra desde el respeto al Amejoramiento y a la Constitución", comentó.

Sanz destacó que Navarra no tiene un problema de territorialidad. Al respecto, se preguntó si en algún momento de la historia, la Comunidad foral y el País Vasco han tenido algún tipo de institución común o han pertenecido a una misma realidad institucional, "salvo la española".

Sanz desgranó por áreas las principales medidas, previa declaración de que esta legislatura será la del fortalecimiento del "capital humano", después de años de decida inversión en capital físico y tecnológico.

Según explicó, es "urgente" crecer en población y productividad, para lo que se hace necesario generar "altas tasas de empleo" en el corto plazo, alcanzar tasas de inversión en I+D+i del 3 por ciento, reducir la carga fiscal en al menos tres puntos - la tarifa máxima del IRPF se situará al 39 por ciento-, construcción de 15.000 nuevas viviendas y reducción de impuesto de sociedades, no más del 20 por ciento para micropymes y del 20 por ciento, para la gran empresa.

El presidente afirmó que su programa de gobierno ha de ser necesariamente "abierto y posibilista". Concluyó ofreciendo un mensaje de "esperanza". Afirmó que hará "lo posible"para que el "grito de la confrontación que ha anidado en el sentimiento de los navarros sea utilizado de manera positiva, dando paso del no contra todo a un por un proyecto de esperanza". "Busco una Navarra unida", aseveró.

Ningún integrante de la oposición aplaudió su discurso de investidura. La tribuna de invitados no estuvo repleta. Acudió a esposa del presidente, Villar López, la senadora Amelia Salanueva y otros cargos públicos de UPN y CDN. Por parte de los socialistas, sólo el secretario general de PSN y senador Carlos Chivite.