El Supremo aumenta a 18.000 euros la indemnización a una niña de 4 años que sufrió abusos de una maestra

Actualizado: lunes, 15 enero 2007 13:49

La docente fue condenada a 3 años de cárcel por un delito de abuso sexual con relación de superioridad.

MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Supremo ha aumentado la indemnización concedida a una niña de cuatro años que fue víctima de abusos por parte de una maestra de su colegio, de 300 a 18.000 euros, al entender acreditado que "la menor, como consecuencia de la agresión sufrida, precisó tratamiento psicológico a fin de hacer posible un adecuado desarrollo psicoafectivo".

La Audiencia Provincial de Madrid condenó a María Aurora O.B., profesora del colegio Jorge Guillén de la localidad madrileña de San Martín de la Vega, a 3 años de cárcel por un delito de abuso sexual con relación de superioridad con inhabilitación especial para el cargo público y profesión de docente de menores de edad.

Como hechos probados declaró que entre las 13 y las 15 horas del 26 de marzo de 2001, la maestra se dirigió a una niña de 4 años de edad, que no era alumna suya y que estaba jugando en el patio, y le dijo que le acompañara al cuarto de baño, donde le realizó tocamientos.

En un reconocimiento médico que se practicó a la niña en el Hospital 12 de Octubre de Madrid se comprobó que presentaba "erosiones en región posterior de orquilla vulvar".

La Audiencia condenó a la maestra a indemnizar con 300 euros a la niña por los daños morales sufridos. Sin embargo, esta cantidad ha sido aumentada a 18.000 euros por el Supremo, ya que considera que el tribunal de instancia omitió los graves efectos psíquicos provocados a la menor.

La sentencia de la Audiencia sólo utiliza, explica el Supremo, el informe de la forense que examinó a la menor "para reforzar la credibilidad de la versión mantenida por la niña ante los tribunales, descartado cualquier fabulación de la misma, lo que limita los efectos de dicho informe a una corroboración de naturaleza periférica, que coadyuva el esclarecimiento del delito cometido".

Dicho informe médico decía que la niña tenía actitudes que probaban el trauma sufrido, como que "desconfía de la figura femenina hasta tal punto que cuando va andando por la calle cualquier roce o situación en la que sea una mujer la que se dirija a ella sin previo aviso hace que tenga miedo y estrés".

Así, el Supremo entiende que "el informe emitido por la psicóloga explica y delimita una consecuencias psíquicas personales que recogen la gravedad de la afección según el dictamen emitido no contradicho por ninguna otra prueba", por lo que la indemnización debe ser elevada a 18.000 euros para ser más acorde con el daño sufrido.

En cuanto al recurso de la profesora, que es desestimado en todos sus extremos, el alto tribunal afirma que "la espontaneidad de un niño es incontestable y la dificultad de mantener con entereza, ante jueces y magistrados, una versión que no responda a la realidad es algo poco menos que imposible". La docente alegaba que en el informe médico utilizado como prueba también se mencionaban abusos a otra niña, a cuyo testimonio no se dio credibilidad y que acabó declarando que su amiga le había contado el abuso sufrido.