'The New York Times' sufre ataques de 'hackers' chinos tras publicar una información sobre Wen Jiabao

Actualizado: jueves, 31 enero 2013 16:09

MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -

El diario estadounidense 'The New York Times' ha afirmado que lleva cuatro meses siendo objeto de ataques por parte de 'hackers' chinos, que han llegado a infiltrarse en su sistema y logrado los passwords de varios de sus periodista a raíz de una información publicada por la cabecera sobre el entorno del primer ministro chino, Wen Jiabao.

El origen de los ataques coincide con la publicación de un artículo el pasado 25 de octubre, en inglés y en chino, en el que se hablaba de las fortuna acumulada por familiares del primer ministro a través de distintos negocios, según ha explicado el diario.

Tras sospechar de la entrada de 'hackers' en su sistema, el rotativo contrató a la empresa de seguridad informática Mandiant para que rastreara el origen de los ataques y le ayudara a levantar mejores defensas. Los especialistas encontraron evidencias de que los 'hackers', utilizando métodos asociados con el ejército Chino, habían conseguido entrar en el sistema de 'The New York Times'.

Concretamente, los 'hackers' consiguieron los 53 empleados del periódico y entrar en el correos del periodista que escribió la información, David Barboza, jefe de la delegación del diario en Shanghai, aunque los expertos han descartado que los 'hackers' logran acceso a ningún correo electrónico con "información sensible" sobre la investigación llevada a cabo por Barboza para su reportaje.

Los 'hackers' penetraron en el sistema del 'The New york Times' a través de ordenadores instalados en universidades de Estados Unidos, un truco que el ejército Chino ya utilizado para atacar a distintos contratistas del ejército estadounidenses, según los expertos. Este sistema, les permitó acceder a ordenadores del periódico e instalar un 'software malicioso' o 'malware' para buscar información.

Según el diario, los ataques parecen formar parte de una campaña más amplia de espionaje contra medios de comunicación que están informando sobre líderes chinos y empresas de ese país.