Tribunal de Cuentas avisa de los desajustes entre la oferta y la demanda en las Universidades de Extremadura y Cartagena

MADRID 29 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal de Cuentas, en su informe anual de fiscalización de la Universidad de Extremadura y de la Universidad Politécnica de Cartagena en relación con los ejercicios 2004 y 2005, avisa de los desajustes que existen entre la oferta y la demanda de las titulaciones académicas.

Según explicó hoy en el Parlamento el presidente del Tribunal de Cuentas, Manuel Núñez, las plazas ofertadas por la Universidad de Extremadura en el curso académico 2005/2006 fueron 8.473, mientras que los alumnos que ingresaron fueron 5.458. En este sentido, subrayó que la evolución de los alumnos de nuevo ingreso en los "últimos cuatro cursos" ha experimentado una reducción del 5 por ciento.

Asimismo, Núñez alertó de que, en el caso de Extremadura, la capacidad docente de la universidad presenta un "exceso de oferta" y, muestra "desajustes" con respecto a las especialidades académicas. Además, señaló que la media de alumnos equivalentes por profesor es de 15 alumnos por docente.

"En Ciencias de la Salud y en Ciencias Sociales y Jurídicas la demanda fue de un 112 y de un 87 por ciento, respectivamente, respecto a las plazas ofertadas, mientras que en la rama de Humanidades las plazas ocupadas sólo cubrieron el 24 por ciento de las ofertadas", remarcó el presidente del Tribunal de Cuentas.

"EXCESO" EN LA OFERTA DE ESPECIALIDADES.

En términos parecidos se pronunció Núñez a la hora de explicar el informe relativo a la fiscalización de la Universidad de Cartagena. Según señaló, las plazas ofertadas para el curso 2005/2006 fueron 3.050 mientras que el número de nuevos alumnos fue de 895, lo que significa que se cubrió "sólo" el 36 por ciento de la oferta efectuada, existiendo así un "exceso" de oferta en todas las especialidades y ciclos.

Dicho esto, Núñez avisó de que el número de nuevos alumnos durante los últimos cuatro años descendió en un "3 por ciento anual", mientras que los créditos impartidos experimentaron un "ligero crecimiento". Asimismo, la media de alumnos equivalentes por profesor fue de 9 alumnos por docente.

El informe también analiza la situación de las asignaturas con menos de 5 alumnos. Un estudio que, según explicó el presidente del Tribunal, muestra que un "25 por ciento de los alumnos" matriculados "no se presentaron a los exámenes".

"PROFUNDA REFLEXIÓN Y REVISIÓN" DEL SECTOR UNIVERSITARIO.

En definitiva, y con los "preocupantes" datos reflejados en los informes de las dos universidades, el presidente del Tribunal de Cuentas indicó que el sector universitario necesita una "profunda reflexión y revisión" con el fin de que no se produzcan estos desajustes.

No obstante, los portavoces de los diferentes grupos parlamentarios instaron al Tribunal de Cuentas a incluir estos dos informes en el informe global de las universidades españolas ya que, según afirmó tanto el portavoz del PP como el portavoz de PSOE, de esta forma se podría realizar un estudio "más exhaustivo" de la situación de éstas dentro del sector.

Unas peticiones que, según declaró Núñez, no pueden realizarse en estos momentos ya que tanto la Universidad de Extremadura como la Universidad de Cartagena pertenecen a una Comunidad Autónoma que "no tienen órgano de control externo".

"Estos informes los hemos hecho porque no están dentro, de una manera específica, del informe general de las universidades que se ha hecho en colaboración con aquellas que sí que tienen un control externo", resaltó para subrayar que por este motivo "el Tribunal de Cuentas se ha visto obligado a realizar una fiscalización específica para cada una de ellas con el fin de, después, incluirla en el informe anual de las universidades".

Por último, el Tribunal de Cuentas recomienda a ambas universidades que implanten una "contabilidad analítica", así como que elaboren una serie de estudios pertinentes para la adecuación de los recursos humanos a las "necesidades reales del servicio público prestado".

Además, recomienda una "mayor concreción" de los objetivos pretendidos en las actividades relacionadas con la investigación, así como una implantación de indicadores que permitan efectuar su "seguimiento y evaluación".