Un Tribunal de Jurado enjuicia hoy a un joven que asestó 61 puñaladas a su padre en Telde (Gran Canaria)

Actualizado: lunes, 13 octubre 2008 10:15

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -

Un Tribunal de Jurado enjuiciará a partir de hoy a un joven acusado de presuntamente asesinar y robar a su padre, a quien asestó 61 puñaladas en el domicilio familiar en el municipio de Telde, en Gran Canaria a principios de diciembre de 2006, y, posteriormente, limpió la casa, escondió el cadáver y huyó del lugar.

La Fiscalía ha solicitado imponer 21 años de cárcel para el acusado, E.T.B., de 28 años de edad, cuyo juicio se celebrará en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Las Palmas en la capital grancanaria, según el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Público al que ha tenido acceso Europa Press.

El fiscal señala que en horas no determinadas pero en todo caso entre la noche del 2 y 3 de diciembre de 2006, el acusado -- en prisión provisional por esta causa desde el 9 de diciembre de ese año --, tuvo una discusión con su padre en la casa en la que ambos residían en la calle Arapiles, en la zona de Lomo Bristol, en las medianías de Telde.

Sin embargo, el joven, "antes de comenzar a discutir con su padre y con el claro propósito de acabar con la vida de éste, había cogido un cuchillo de la cocina y se lo había escondido entre sus ropas". En el transcurso de la discusión, que tuvo lugar en el salón de la casa, el acusado le pegó un primer puñetazo en la cara a su padre que hizo que cayera al suelo.

"Cuando su padre se intentó reincorporar, le clavó el cuchillo en el cuerpo, cayendo de nuevo la víctima al suelo, aprovechando el momento el acusado para apuñalarlo en el tórax en repetidas ocasiones", añade el escrito, que detalla que, además de las puñaladas en el tórax, el procesado, "pensando que ya había acabado con su vida, le dio la vuelta y le asestó más puñaladas por la espalada y por el costado".

En total, según el Ministerio Fiscal, el imputado asestó a su padre 61 puñaladas que le ocasionaron 61 heridas incisopunzantes, 24 a nivel dorsal, de las que siete fueron penetrantes y una le alcanzó el corazón, tres en flanco izquierdo, 17 en el plano toracicoanterior y en el abdomen de las que siete fueron penetrantes, así como 15 en el cuello de las que dos afectaron a la vena yugular izquierda, una en el clavicular derecho y otra en el bíceps derecho. Todo ello le produjo una hemorragia aguda crítica que ocasionó su muerte.

ESCONDIÓ EL CADÁVER DEBAJO DE LA CAMA

El escrito de la Fiscalía precisa que, "una vez desangrado el cadáver, el imputado limpió toda la casa con la intención de no dejar rastro alguno de los hechos y escondió el cadáver de su padre bajo la cama del dormitorio auxiliar de la vivienda e introduciéndole los brazos por los calzoncillos para que no fuera descubierto".

En ningún momento, el joven dio razón del paradero de su padre a su madre, que acudió dos veces a la casa el día 4 de diciembre para interesarse por el destino de su ex marido hasta que sobre las 22.00 horas del citado día, la mujer encontró el cadáver del hombre, al inspeccionar la vivienda y bajo las sospechas de que algo le había sucedido a su ex marido.

El acusado, sin embargo, ya había huido del lugar y había cogido previamente la tarjeta de crédito de su padre asociada a la cuenta de La Caja de Canarias y de la que no estaba autorizado para disponer, de forma que con el propósito de obtener un beneficio patrimonial ilícito sacó de un cajero automático la cantidad de 150 euros.

TRASTORNO DE PERSONALIDAD

El joven presentó un cuadro clínico compatible con un trastorno límite de la personalidad, que no produce una afectación de sus capacidades intelectivas, pero que pueden verse afectadas de forma parcial sus capacidades volitivas en determinadas circunstancias, agrega el escrito.

Así, según el Ministerio Fiscal, concurren en E.T.B. la circunstancia modificativa de la responsabilidad criminal mixta de parentesco que agrava el presunto delito de asesinato y atenúa el de robo con fuerza; al igual que la atenuante de anomalía psíquica respecto del delito de asesinato.

De ahí que el fiscal solicite una pena de 20 años de cárcel por el presunto delito de asesinato y un año de prisión por el supuesto delito de robo con fuerza. Como pena accesoria, solicita que se aplique para el procesado inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo (derecho a presentarse a las elecciones) por el tiempo de duración de la condena y el abono de costas.

En concepto de responsabilidad civil, la acusación pública reclama igualmente que el acusado indemnice a los herederos legales de su padre en la cantidad de 120.000 euros.

Este supuesto parricidio causó gran conmoción en la ciudadanía, especialmente entre los vecinos de Lomo Bristol que en el momento en que ocurrieron los hechos expresaron su asombro por el suceso y afirmaron que nunca habían oído discusiones "ni escándalos" en el domicilio del fallecido, a quien consideraban una persona "muy discreta", aunque algunos comentaron que "había problemas" entre el hijo y el padre.