Un tribunal popular de Córdoba juzga hoy a unos 'gorrillas' acusados de la muerte de un conductor

Actualizado: lunes, 19 enero 2009 8:44

CÓRDOBA, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -

El ministerio público pide 37 años de prisión para G.A.V. y A.T.M., que serán juzgados hoy en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Córdoba por un tribunal popular, tras supuestamente apuñalar y ocasionar la muerte de un hombre que se negó a pagar a unos 'gorrillas' por aparcar su coche.

Según la calificación del fiscal, a la que tuvo acceso Europa Press, a principios de febrero de 2006, la víctima aparcó su vehículo junto a la plaza de toros, en Córdoba, donde G.A.V. le pidió dinero por ello. Al decirle el fallecido que no tenía suelto, le contestó que no se hacía responsable de lo que le pasara al coche, por lo que discutieron al interpretarlo la víctima como una amenaza, llegando el procesado a arrojarle una botella de cerveza.

Posteriormente, el 27 de febrero, sobre las 18,00 horas, se encontraron de nuevo y volvieron a discutir por el mismo motivo. Así, sobre las 18,20 horas los dos procesados, junto con otros, que no han podido ser encontrados, supuestamente se dirigieron con armas blancas en busca de la víctima para darle un escarmiento.

Cuando se aproximaron a él, que se iba a subir en su coche junto con su pareja e hijo, A.T. gritó "cogedlo", y rodearon el vehículo para impedirle la huida, esgrimiendo las armas blancas. Empezaron a golpear el coche con piedras y barras metálicas, mientras que G.A.V. le gritaba "te vas a enterar, y ahora qué", añade la calificación.

Ambos iniciaron un forcejeo, en el transcurso del cual un hermano de la víctima salió a la calle e interpeló a los agresores. En ese momento, el hombre supuestamente aprovechó para levantarse del asiento del conductor, pero G.A.V., "con la intención de causarle la muerte", le clavó una navaja de diez centímetros de hoja a la altura del tórax, lo que le causó la muerte por taponamiento cardíaco.

Aunque el herido presuntamente intentó atrapar a los agresores con una navaja y un destornillador, sólo pudo avanzar unos pasos y se desplomó. Ante esto, y cuando la víctima ya estaba tendida sobre el asfalto G.A. manifestó "vámonos que ya está todo hecho".

Alternativamente, el ministerio fiscal expone otra versión de los mismos hechos. Según esta tesis, la víctima intentó defenderse con un destornillador largo y una navaja, armas con las que corrió detrás de los acusados. Pero al ponerse a la altura de A.T.M., el acusado, "con intención de causarle la muerte", le clavó supuestamente una puñalada a la altura del tórax que le causó la muerte casi instantánea.

En caso de que el jurado considere probado este supuesto, la acusación pública propone 29 años de cárcel, 15 años para A.T.M. y 14 para G.A.V. por un supuesto homicidio. Si se estima el primero, el fiscal pide 20 para G.A.V. y 17 para A.T.M. por un delito de asesinato.