El TS archiva la querella contra Martínez Pujalte por decir que el juez Castro busca protagonismo en el "caso Nóos"

MADRID 29 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Supremo ha archivado la querella presentada el pasado mes de abril contra el el diputado popular Vicente Martínez-Pujalte por un presunto delito de injurias contra el juez del "caso Nóos", José Castro, del que dijo que busca aumentar su "protagonismo personal" mediante la imputación de la Infanta Cristina.

El alto tribunal, en coincidencia con el Ministerio Fiscal, considera que los hechos no son constitutivo de delitos "dado el contexto en que tuvieron las manifestaciones con ocasión del intenso debate que se projujo por la imputación" de Cristina de Borbón.

En la resolución dada a conocer este lunes se señala que no se aprecia que por parte del parlamentario del PP hubiera ánimo por injuriar, "pues las citgadas frases suponen más una crítica exacerbada y desafortunada" pero no con intención de atentar contra el honor del juez de Instrucción número 3 de Palma de Mallorca.

En otro punto del auto se hace referencia a la doctrina del Tribunal Constitucional para subrayar que "los límites permisibles de la crítica son más amplios si ésta se refiere a personas que, por dedicarse a actividades públicas, están expuestas a un más riguroso control de sus actividades y manifestaciones que si se tratase de simples particulares sin proyección pública alguna".

Añade el Supremo que, "en un sistema inspirado en los valores democráticos, la sujección a esa crítica es inseparable de todo cargo de relevancia pública".

Manos Limpias, personado como acusación popular en el "caso Nóos", consideraba por su parte que Martínez Pujalte se había excedido en su derecho a la libertad de expresión y ha menoscabado la dignidad de titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma de Mallorca, amparada en los artículos 10 y 18 de la Constitución.

** El diputado señaló en la entrevista radiofónica que pensaba que algunas de las actuaciones de Castro están marcadas por el protagonismo personal", en vez de tener el objetivo de "saber la verdad y con prontitud".