La viuda de Múgica ve en el País Vasco a "una sociedad enferma" en la que se "está inoculando el odio a los niños"

Actualizado: jueves, 4 diciembre 2008 15:29

MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

La viuda de Fernando Múgica, Mapi de las Heras, se mostró hoy muy pesimista respecto a la situación que se vive en el País Vasco, que calificó de "sociedad enferma" en la que se "está inoculando el odio a los niños" desde la escuela.

"Yo veo muy difícil el arreglo porque es una sociedad en que se está inoculando el odio a los niños. Se concedieron muchas cosas, entre ellas la educación, y allí están educando en el odio. Y allí además hay una generación que no sabe lo que es vivir en libertad (...) Nadie dio su vida, les fue arrebatada porque no querían morir", indicó De Las Heras en una concentración de repulsa contra el último atentado de ETA, que costó la vida de Ignacio Uría.

"Mi marido no dejó el País Vasco porque era de los que prefirió morir de pie que vivir arrodillado. Veo muy difícil solución, llegue quien llegue, porque la sociedad está muy gravemente enferma", añadió, por lo que no le extrañan las reacciones de la sociedad vasca.

Cuando ETA asesinó a su marido, ella misma tuvo "vivencias patéticas", confesó. "Es una sociedad enferma, absolutamente enferma. Es un cáncer, ya llevamos 40 años con esto allí instalado. Es una sociedad dividida. La impresión que saco cada vez que voy allí es que cada vez la falla es más ancha. Es una sociedad miedosa, cobarde, absolutamente insolidaria", dijo.

"Y como siempre hay justificación, dicen que ETA no va a cambiar las agendas. No se trata de que ETA cambie o no las agendas, se trata de tener un poquito, poquito, poquito, de cariño, caridad, sensibilidad, humanidad", añadió. "Es muy lamentable, yo tengo un gran disgusto. Yo nací allí y estoy aquí, tomé la decisión de vivir aquí. Me hubiera venido desde el primer momento con cadáver y todo, pero por mis hijos no lo hice. Estoy encantada de estar aquí, me he empadronado aquí", dijo De Las Heras.

"Aquí tendré que pagar por otras cosas, porque en todas partes hacen con tu dinero lo que consideran según sus ideas, pero yo me niego en redondo a que con parte de mi dinero el gobierno vasco pague nada a los familiares de los asesinos de nuestros seres queridos, eso es una inmoralidad", agregó.