Los hoteles rurales del norte de Navarra tendrán una ocupación del 80 por ciento en los puentes de diciembre

Actualizado: jueves, 29 noviembre 2007 10:10

PAMPLONA, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Hoteles Rurales de Navarra tiene previsto que la ocupación de sus establecimientos en el norte de la Comunidad Foral durante el periodo de los puentes de diciembre sea del 80 por ciento. En cambio, en las zonas más meridionales y en la Navarra media se ocuparán, según sus estimaciones, entre un 50 y un 70 por ciento de las camas.

Así lo explicó en declaraciones a Europa Press el gerente de la Asociación de Hoteles Rurales de Navarra, Iñaki Olaiz, quien valoró estos índices como "una ocupación aceptable". En su opinión, "el perfil de este puente es más urbano que rural ya que la gente prefiere destinos como grandes ciudades europeas antes que un ambiente de campo".

Desde esta asociación, que agrupa a 35 establecimientos, la causa estriba en que "al medio rural le faltan atractivos para el invierno puro y duro". Por este motivo cuesta más llenar los hoteles rurales, aunque, según aclaró Olaiz, "poco a poco se va consiguiendo que la ocupación sea bastante buena".

La diferencias son notables entre las diferentes zonas de Navarra. "Hay zonas que tienen siempre mucha demanda, como la de Irati, Salazar, Roncal, Aézkoa y Baztán. En cambio en la zona media o el prepirineo hay menos. Pero aunque sean zonas menos conocidas, cuando las otras se llenan la demanda va bajando hacia abajo", explica Olaiz.

Esto se debe a que "la imagen de Navarra en cuanto turismo rural está muy asociada a al montaña", algo que, en su opinión, "es un error porque hay zonas muy diferentes y muy atractivas también". Esta situación tiene su causa en que "en el norte es donde más oferta ha habido siempre de casas y hoteles rurales y allí está muy consolidada la demanda mientras que en otras zonas falta todavía tener una demanda propia".

En la época que se avecina a partir de estos puentes "se pincha mucho". Para Olaiz "es la travesía en el desierto" porque "los excesos de los puentes, fiestas y navidades se pagan, es como el Guadiana, la demanda se esconde y hasta que no llega marzo sólo hay pequeños flujos". Por esto, el que comienza ahora es un periodo en el que "muchos hoteles aprovechan para coger vacaciones o hacer reformas".

No obstante, "en Navidad también hay demanda". Pero lo que ocurre es que en estas fechas "los propietarios de los hoteles rurales muchas veces también quieren hacer vida de familia". Esto, sumado a que resulta más difícil conseguir personal para estas fechas hace que con este escenario "el que abre hace negocio", pero "si todos abrieran no sería para tirar cohetes".

En cuanto a a las tendencias que se observan en la hostelería rural, Olaiz considera "el crecimiento de la oferta no está acompañado por un crecimiento en la demanda, que crece pero no al mismo nivel". Cuesta, por lo tanto, "defender las cifras de negocio y crecer". También estima que "la gente compra más tarde, sale más veces y las estancias son más cortas".Por todo ello, en su opinión, "la oferta tiene que ir cambiando porque el escenario es otro".