PAMPLONA, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en Navarra, Vicente Ripa, anunció esta mañana la puesta en servicio, en el primer semestre de 2008, de la Oficina Única de Extranjería. Las nuevas dependencias estarán situadas en un inmueble de nueva planta del barrio pamplonés de Buztintxuri. Contará con 1.100 metros cuadrados construidos.
Así lo expuso en su intervención en la apertura de las Jornadas nacionales 'Jóvenes inmigrantes y mediación' que se celebra en la Escuela de Enfermería de la UPNA. Según Ripa, en esta Oficina Única se van a agrupar los servicios que actualmente se prestan en los locales del Cuerpo Nacional de Policía (calle Pascual Madoz, en Pamplona) y en el Área de Trabajo y Asuntos Sociales de la Delegación del Gobierno en Navarra (Avenida de Bayona, también en Pamplona).
Señaló que el valor añadido de estas nuevas dependencias "no va a consistir sólo en la gestión integral, y en un único local, de los trámites documentales en materia de inmigración; también va a conllevar un incremento en la plantilla de funcionarios (que se está definiendo en estos momentos)".
Ripa indicó en los últimos tres ejercicios, se están ejecutando en Navarra por la Administración del Estado más de 50.000 trámites anuales de Extranjería sin contar las gestiones de información al público, en torno a 18.000 en el Área de Trabajo y Asuntos Sociales más otras 15.000 personas en la Policía (que también materializa del orden de 26.000 citaciones para expedir tarjetas de residencia y para presentar documentación varia).
APORTACION A LA ECONOMIA
Durante su intervencion, Vicente Ripa señaló que Navarra sería hoy "menos pujante y más provinciana sin la inestimable contribución de los inmigrantes, jóvenes y no tan jóvenes". "Una contribución en el ámbito económico, porque hoy desempeña 31.471 empleos, más del 11 por ciento de los puestos de trabajo existentes en Navarra y dados de alta en la Seguridad Social; y una contribución también en el ámbito social, porque la Comunidad Foral es hoy más plural".
A su juicio, la inmigración ha hecho una aportación "esencial" para el desarrollo y el bienestar de Navarra, y muy especialmente en sectores claves como la construcción (7.170 inmigrantes de alta en la Seguridad Social), la industria manufacturera (5.234 cotizantes), la hostelería (2.867) o el comercio (2.486).
Según detalló, el empleo de personas inmigrantes, el 66 por ciento procedentes de países ajenos a la Unión Europea, "no sólo está cubriendo nichos productivos y de servicios que estaban sufriendo una alarmante carencia de mano de obra, sino que también está contribuyendo a la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, ya que una tercera parte de esos trabajos los están ocupando ellas".
El delegado manifestó que, en términos absolutos, ni los inmigrantes quitan a los autóctonos empleos ni están estrangulando el sistema de protección social. "Al contrario, las más de las veces realizan labores profesionales que los lugareños rechazan y los inmigrantes son precisamente quienes garantizan la sostenibilidad del sistema, muy particularmente en el caso de las pensiones por el envejecimiento de las sociedades occidentales", señaló.
Ripa indicó que a día 15 de noviembre residían legalmente en Navarra 58.327 personas (el 9,64 por ciento de la población, 605.022 habitantes con el padrón provisional a 1 de enero de 2007). Por tanto, seis de cada diez extranjeros legales residentes en Navarra con posibilidad de trabajar lo hacen y están afiliados a la Seguridad Social, añadió.
"Pero es que, habida cuenta de que otros 11.394 extranjeros habían pedido la tarjeta de residencia y que son excepción las solicitudes que no se conceden, la cifra de extranjeros con la documentación en ciernes de estar en regla supera las 65.000 personas", agregó.
