Actualizado 15/10/2008 20:07

Crónica Delincuencia.- La Policía se incauta de 17.000 joyas falsas de primeras marcas valoradas en 3 millones de euros

- Un total de 22 personas han sido detenidas, entre ellos responsables de diversas joyerías distribuidas por toda España

MADRID, 15 Oct. (OTR/PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo organizado dedicado a la importación, producción y distribución de joyas falsas de prestigiosas marcas en todo en territorio nacional, en una operación en la que han sido detenidas 22 personas, entre ellos el proveedor, los distribuidores, mayoristas y responsables de distintas joyerías de toda España implicadas. En total, se han intervenido 16.767 piezas que imitaban diseños de Versace, Dolce&Gabanna, Channel, Cartier o Bulgari, que podrían superar los tres millones de euros en el mercado.

La investigación se inició con la denuncia interpuesta, ante la Policía Municipal de Madrid, por el representante legal de una prestigiosa compañía italiana que alertó de la existencia de dos empresas que estaban vendiendo en internet joyas falsas de la marca que representaba. La Brigada de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional, concretamente el grupo Antipiratería, se hizo cargo, entonces, de las gestiones necesarias para identificar, y posteriormente desmantelar, el grupo organizado que no solo importaba y comercializaba joyas falsas de la marca inicialmente denunciante, sino también de otras de gran prestigio en el mercado.

El grupo desarticulado, según señaló el rueda de prensa, el comisario jefe de Investigación Tecnológica, Manuel Vázquez, estaba integrado por individuos de nacionalidad española, organizado jerárquicamente y con una delimitación de las funciones de cada uno de sus miembros. La organización recibía de forma semanal o quincenal la mercancía, de tal forma que conseguían ofrecer en el mercado ilícito las réplicas en primicia, casi al mismo tiempo que los originales. Las piezas, que eran recibidas en Córdoba, donde se ubicada el proveedor y los distribuidores, eran finalmente comercializadas en todo el territorio nacional.

Aunque las piezas provenían principalmente de Tailandia, también se detectó la producción de falsificaciones en España. Así, en los registros efectuados en dos joyerías de Madrid se intervinieron 130 moldes de tres conocidas marcas, así como ceras para la fabricación de joyas. En ambas inspecciones también se intervinieron piezas de las mismas marcas. Todos los establecimientos y joyerías registrados, en total 56, compaginaban las actividades ilícitas con las legales de un establecimiento de joyería, lo que dificultó el descubrimiento de las actividades delictivas.

Los precios de venta al público eran más baratos que la joya original, pero mucho más caros que los de otra joya corriente de idéntica naturaleza. "Piezas de Cartier eran vendidas a 1.000 euros cuando el precio de las verdaderas oscilaba los 3.000", explicó Vázquez, quien señaló que ésto ha causando a los legítimos propietarios de las marcas no sólo pérdidas económicas sino también graves perjuicios. Por otra parte los clientes pueden sentirse engañados al comprar las joyas falsas en joyerías que les ofrecen credibilidad sobre la condición de las piezas que adquieren y que luego no son auténticas.

DESDE TAILANDIA A CÓRDOBA

En cuanto a la entrada de las joyas falsas a España, según las Policía, se llevaba a cabo desde diversos países de Asia hasta Córdoba por transporte aéreo y, posteriormente, se las entregaba a otros distribuidores que las repartían a mayoristas en varias regiones españolas. Por último, éstos las comercializaban en joyerías y establecimientos minoristas o las vendían por Internet. Las joyas más solicitadas eran los modelos más novedosos en el mercado, de las cuales sacaban fotografías y las remitían al productor para que las falsificara y en el menor tiempo posible realizara el envío con el fin de disponer siempre de las últimas novedades.

En la operación se realizaron inspecciones en 50 joyerías en las localidades de Lugo y Ferrol "desde donde se repartía el material por el norte", Madrid, "para comercializar la mercancía en el centro del país" y Cádiz, Sevilla y Córdoba, "que cubrían la zona sur y del levante", comentó el Inspector jefe durante su intervención. Muchos de los responsables de estos establecimientos fueron detenidos, así como los miembros de la banda, saldándose la operación con un total de 22 detenidos y 14 imputados, acusados de importar, producir y distribuir las piezas, que, señalan las fuerzas de seguridad, habrían alcanzado los tres millones de euros en el mercado.

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