Actualizado 30/10/2007 20:36

Crónica Euskadi (3).-El Gobierno vasco dice que el juicio a Ibarretxe es "contra la sociedad vasca" y su volundad de paz

- El PSE insiste en que pedirá el archivo de la causa y asegura que "hay razones sobradas para demostrar que no hubo delito"

VITORIA/BILBAO, 30 Oct. (OTR/PRESS) -

"Un juicio contra la sociedad vasca y su voluntad mayoritaria de alcanzar la paz y la normalización política". Esto, y no otra cosa, es lo que para el Gobierno vasco supone la decisión del TSJPV de abrir juicio oral contra el lehendakari, Juan José Ibarretxe por reunirse con la ilegalizada Batasuna. Una resolución judicial que, en palabras de la portavoz del Ejecutivo de Vitoria, Miren Azkarate, "criminaliza" el diálogo y "quebranta gravemente" los derechos fundamentales de Ibarretxe. Por su parte, el PSE, cuyo secretario general, Patxi López, y su secretario de Organización, Rodolfo Ares, también están imputados, insistió en que pedirá el archivo de la causa y asegura que, de no conseguirlo, tiene "razones sobradas para demostrar que no hubo delito".

En una comparecencia especial tras hacerse pública la apertura del juicio oral contra Ibarretxe, Azkarate destacó que con la decisión del TSJPV "por primera vez en la historia" y "por impulso político" se enjuicia penalmente la lehendakari "por ejercer su función política", por desarrollar la labor "para la que ha sido elegido por la sociedad vasca".

Así, la portavoz del Ejecutivo de Vitoria proclamó que el proceso abierto contra Ibarretxe es "un juicio contra la sociedad vasca y contra su voluntad de alcanzar la paz y la normalización política" y denunció que con esta decisión el Alto Tribunal vasco "criminaliza el diálogo político".

"La decisión se adopta no sólo contra el Tribunal Supremo, no sólo contra la Constitución, no sólo contra el criterio de la Fiscalía, no sólo contra la propia jurisprudencia de la Sala de lo Civil y Penal del Superior, sino sobre todo contra esta sociedad y este país que mandato al lehendakari para que hiciera política y solucionara los problemas", afirmó Azkarate, que además criticó el silencio del Tribunal Constitucional cuando "se están quebrantando gravemente los derechos fundamentales del ciudadano y lehendakari Juan José Ibarretxe".

URKULLU: "NO ES MÁS QUE POLÍTICA"

En esta misma línea, el portavoz del PNV, Iñigo Urkullu, denunció que el proceso que se abre contra el lehendakari por reunirse con Batasuna es "un juicio político". "Estamos hablando de política, no de otra cosa", afirmó el portavoz jeltzale, que señaló que la decisión de hoy "ahonda en el descrédito de la Justicia" que está totalmente "politizada".

El resto de formaciones que componen el tripartito vasco también fueron muy críticas a la hora de valorar la resolución del TSJPV. El secretario de Organización de EA, Rafael Larreina, también denunció que se trata de un juicio con "clara intencionalidad política" y reclamó "un poder judicial vasco propio", mientras que el portavoz de EB, Mikel Arana, destacó el "absurdo jurídico" que supone una decisión que considera "un abuso de poder inadmisible".

HAY RAZONES DE SOBRA

Y tras conocer la decisión del TSJPV, el PSE, "desde el máximo respeto a las decisiones judiciales", siguen manteniendo que sus dirigentes al reunirse con Batasuna simplemente cumplieron con la "obligación política" de "trabajar por la paz en el País Vasco".

Los socialistas anunciaron que "defenderán siempre la legalidad" de la actuación de López y Ares y que volverán a pedir el archivo de la causa "por la imposibilidad de juzgar a quienes sólo están acusados por una acusación popular". Además anunciaron que, si eso no prosperase, "existen razones sobradas para demostrar que no se han cometido ningún delito y obtener una sentencia absolutoria".

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