- De la Vega considera que los populares "deberían serenarse" y dejar de confrontar con "las cosas que son de todos"
MADRID, 11 Oct. (OTR/PRESS) -
A menos de 24 horas de la celebración de la Fiesta Nacional, la tensión dialéctica entre el Gobierno y el PP a cuenta de la solemne declaración institucional que ayer realizó el líder de los populares, Mariano Rajoy. La vicepresidenta del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, llegó a tildar el vídeo de "mala ocurrencia con puesta en escena estridente, demagógica y sectaria" y acusó al presidente del PP de "exhibir actitudes que recuerdan a otra época". Por ello, realizó un llamamiento a los dirigentes populares, de los que consideró que "deberían serenarse" y abandonar "esa línea de la confrontación y de la utilización partidaria de las cosas de todos".
Durante su comparecencia en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros, De la Vega leyó una declaración institucional de cara a la celebración del Día de la Hispanidad, recordando que así se estableció en una ley sancionada el 7 de octubre de 1987 por el Gobierno de Felipe González. En la exposición de motivos de aquella norma se explicaba que la fecha elegida simbolizaba "la fecha en la que España iniciaba su proyección más allá de los límites europeos", esto es, el descubrimiento de América el 12 de octubre de 1492.
Los 20 años transcurridos desde aquella ley han servido "para asentar los valores que guían el proyecto colectivo de convivencia de los españoles, forjado en la libertad, la igualdad, el respeto al pluralismo y la Justicia". Un periodo "en el que hemos recuperado y normalizado plenamente" la Fiesta Nacional, fiesta "de todos los ciudadanos que con su trabajo y dedicación conforman la realidad de la España moderna, tolerante y abierta al mundo, de la que nos sentimos orgullosos los millones de españoles que hemos contribuido a forjarla como una gran sueño colectivo, con esfuerzo, tesón, confianza y a veces con la propia vida".
"Somos un gran país al que con nuestro esfuerzo y confianza en la democracia hemos sabido sacar de tiempos difíciles convirtiéndolo en una referencia internacional de progreso y mañana vamos a celebrar la Fiesta Nacional con alegría sabiendo que hay muchas razones para estar satisfechos, seguir trabajando y acabar con la violencia. La de mañana es una fiesta para alegrarnos por el fructífero camino y seguir mirando el que tenemos por delante en el futuro, de todos y para todos. España y los españoles lo merecemos", remachó De la Vega.
RECUERDOS DE OTRAS ÉPOCAS
Ya en el turno de preguntas, la vicepresidenta fue interrogada por la solemne alocución de Rajoy que distribuyó ayer el PP, sobre la que quiso dejar bien claro que en España existe libertad de expresión, pero que "otra cosa muy distinta" es la valoración que hacen los ciudadanos "y en esas valoraciones Rajoy sale mal parado". "Es una nueva ocurrencia de los dirigentes del PP y Rajoy, una mala ocurrencia con una puesta en escena estridente, demagógica y sectaria", censuró De la Vega, que insistió en que el 12 de octubre siempre se ha celebrado "como la fiesta de todos, aunando voluntades en torno a las Fuerzas Armadas y presididos por el jefe de Estado".
"Lo hemos hecho y lo seguiremos haciendo con plena normalidad democrática, sin exageraciones y sin excepciones", resaltó, antes de señalar que los dirigentes del PP "deberían serenarse", aunque dijo querer pensar "que las cosas que están diciendo y haciendo responden más a la confusión y a la falta de agurmentos para hacer oposición que a la convicción". Así, la vicepresidenta consideró el vídeo de Rajoy en "esa línea poco responsable de la confrontación y de la utilización partidaria de las cosas que son de todos".
"Ni las exageraciones, ni las exaltaciones son buenas, sobre todo cuando se exhiben actitudes que a veces más bien recuerdan a otra época", remachó. Frente a esta actitud, De la Vega destacó la de la "inmensa mayoría de los españoles", que respeta "los símbolos" y está "tranquilo". "El Gobierno está con la inmensa mayoría de los españoles que quiere que se respeten los símbolos de todos", concluyó la vicepresidenta.