Crónica Macro (2).- Rajoy acusa a Zapatero de derrochar "la mejor herencia económica que jamás ha dejado un gobierno"

- Solbes rechaza medidas de choque contra el repunte inflacionista por contraproducentes

TOLEDO/MADRID, 10 Ene. (OTR/PRESS) -

El líder del PP, Mariano Rajoy, acusó hoy al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de "haber dilapidado la mejor herencia económica que jamás ha dejado un gobierno de España" y apostó por resolver la situación con reformas que continúen el proceso de liberalización y privatizaciones. Pero el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, descartó hoy que se vayan a tomar medidas de choque contra el último repunte de la inflación, que subió en diciembre hasta el 4,3%, al considerar que solucionaría "un problema político a corto plazo a costa de generar en el medio plazo problemas para la sociedad". Por ello, confió en que en primavera de este año volverá a sus niveles habituales.

Una conferencia de su partido celebrada en Toledo sirvió a Rajoy para criticar al presidente del Gobierno por la economía que atraviesa nuestro país. Para el presidente de los populares, la economía de las familias españolas "no va bien" y necesita una solución inminente que Zapatero no podrá ofrecer porque "vive en otro mundo y no sabe lo que está sucediendo".

Por este motivo, Zapatero "falsea" la realidad y lo niega "todo", según los populares, que son los únicos que dicen "la verdad" a los españoles. Así lo afirmó Rajoy, que también aprovechó su intervención para responder al presidente del Ejecutivo por haber criticado el pasado miércoles el "alarmismo económico injustificado" y el carácter "poco patriótico" de los populares. Rajoy lamentó esta calificación y la achacó a que el Gobierno no quiere oír sus críticas, que inciden en que el Gobierno socialista "ha dilapidado la mejor herencia económica que jamás ha recibido un gobierno de España", por lo que ahora es necesario "volver a hacer reformas" y continuar con el proceso de liberalización, privatizaciones y apostar por la educación.

Pero estas reformas no son necesarias para mejorar la economía, según Solbes, que con un "no categórico", aseguró hoy durante una comparecencia a petición propia ante la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso que el Gobierno no va a llevar a cabo medidas de choque para afrontar las consecuencias del último repunte de la inflación, que se situó en el 4,3% el pasado mes de diciembre. "Nada sería peor que adoptar medidas de choque en respuesta a este temporal repunte inflacionista", explicó.

De llevarse a cabo, no harían más que "crear numerosas distorsiones económicas" y solucionar "un problema político a corto plazo para el Gobierno, pero a costar de generar en el medio plazo problemas para la sociedad". Por ello, el titular de Economía y Hacienda apostó porque "las tensiones sobre los precios no serán duraderas", ya que en primavera de este año volverán a sus niveles habituales.

CRECIMIENTO ECONÓMICO

Tras echar por tierra todas las medidas que supongan grandes subidas o bajadas impositivas, como las llevadas a cabo en legislaturas pasadas del PP para afrontar la inflación, el Gobierno se decantará por "una política fiscal ligeramente restrictiva". Asimismo, precisó que las reformas fiscales que se plantean caminan "hacia una reducción en las rentas de trabajo en los niveles de menos ingresos". En este sentido, Solbes destacó que la última tendencia inflacionista responde a "un problema relacionado con los mercados de crudo y cereales" y no a un problema de fondo de nuestra economía.

De hecho, según aseguró el ministro, la economía española creció "en el entorno del 3,5%" en el cuarto trimestre de 2007, tres décimas menos que en el trimestre anterior, lo que supone un crecimiento "muy robusto". Así, calificó de "espectacular" el crecimiento potencial de la economía en los últimos años y, con los datos en la mano, criticó al PP por su "catastrofismo", cuando paradójicamente en el momento de su gobierno, la economía crecía al 3%.

Sin embargo, apuntó que durante 2008 la economía crecerá en torno al 3,1%, desaceleración que se dejará notar en el mercado de trabajo, aunque "no cabe pensar en un cambio significativo en la situación actual", caracterizada por el dinamismo en la creación de empleo y por los registros históricos en las tasas de desempleo, actividad y ocupación.

Por otra parte, Solbes también se refirió durante su comparecencia al incremento del IPC reconociendo que "erosiona" la economía de las familias, que ya están suficientemente tocadas por el incremento de los tipos de interés, pero restó importancia a su endeudamiento para lo que invitó a observar "cualquier centro comercial para ver las colas que se han producido en las recientes fechas para comprar cosas".