Galaxy View (análisis): todo es 'tablet' hasta donde alcanza la vista...

   MADRID, 8 Ene. (Carlos Hergueta/Portaltic) -

Galaxy View es un tablet que se puede calificar de muchas formas, menos de convencional. Gigantesco, enorme, titánico, pantagruélico, enorme e, incluso, desmesurado quizá serían buenos calificativos. Porque sus 18,4 pulgadas lo convierten en una tableta complicada de transportar, pero muy acertada para consumir multimedia.

   ¡El mundo de la tecnología es apasionante! Siempre a la vanguardia, siempre abriendo camino, siempre creando nuevos mercados... O no. El mercado de consumo también es soporífero a veces: más móviles "como el iPhone", otro 'tablet', la fiebre loca de los 'smartwatches' clónicos... 

   A Samsung se le pueden echar unas cuantas cosas en cara, como que a veces se fija demasiado en Apple o que ha descuidado la calidad de algunas de sus líneas de producto, como los 'smartphones' de gama baja.

   Lo que no se le puede reprochar a la surcoreana son sus ganas de innovar. Eso les llevó a lanzar un 'smartphone' con pantalla curva que puede presumir de ser actualmente uno de los mejor diseñados del mercado (S6 Edge y su hermano mayor Edge Plus) o a crear hace años la categoría de 'phablets' con el primer Galaxy Note.

   Ahora que un teléfono tenga 5 pulgadas nos parece lo más normal del mundo, o incluso que haya 'stylus' para controlar pantallas táctiles, además de usar los dedos. Eso se lo debemos a la gama Note, que inició una revolución.

   Eso nos lleva al Galaxy View. El extraño y gigantesco 'tablet' con pantalla de 18,4 pulgadas y un peso de 2,65 kg parece que trata de hacer algo parecido, aunque me extrañaría que lo consiguiera. Por varios motivos: el primero es que no todo el mundo le da el mismo uso a un 'tablet' y por ese motivo aquí "más" no es necesariamente sinónimo de "mejor"; el segundo es que la tableta es un segmento de producto estancado que no se renueva tanto como un teléfono.

   Por estos motivos el Galaxy View no será un producto con la misma repercusión que el Note, ni su aportación es tan grande. Por muy grande que sea el "bicho".

   Y aquí viene el PERO.

   Dicho lo cual, tengo que decir que este producto me ha gustado. Es un producto muy de nicho, con usos específicos, pero que en esos usos cumple como el mejor. De hecho, para ciertas cosas, el Galaxy View puede ser la mejor opción: puede ser el compañero ideal.

¿QUÉ ES DESTACABLE DE ESTE DISPOSITIVO?

   Su pantalla, por supuesto. Su pedazo de pantalla TFT de 18,4 pulgadas con una resolución (justita) de 1080 por 1920 pixels. El Galaxy View no parece un tablet, sino una televisión. Cuando la saques por primera vez de la caja, te aseguro que te va a sorprender. Qué sorprender: ¡te va a asustar!

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE?

   La primera vez que supe de la existencia de este equipo e incluso cuando lo vi por primera vez, no puede evitar sentir que alguien en Samsung estaba perdiendo el juicio. Sin embargo, pasado el rechazo inicial, el Galaxy View comienza a mostrarse como un equipo magnífico para lo que sirve: disfrutar de películas, música y, por qué no, videojuegos.

   Sin darme casi ni cuenta, comencé a utilizar el Galaxy View en casa más que mi 'tablet' habitual, el iPad Air 2, un logro que no había conseguido ninguna otra tableta antes, para consumir contenidos multimedia y para dibujar (no así para usar redes sociales, para lo cual el móvil sigue siendo la estrella; o leer artículos, un uso para el cual las 10 pulgadas me siguen pareciendo el tamaño óptimo).

   Casi sin darme cuenta, el Galaxy View se ha convertido en una televisión secundaria en dos habitaciones donde no quiero tener una tele "permanente": el dormitorio y la cocina. También la uso habitualmente como segunda pantalla (con cascos) en el salón cuando la televisión principal estaba ocupada. De esta forma, puedo estar en la misma habitación, pero viendo mi propia serie.

   Por otra parte, cuando me fui de vacaciones unos días a visitar a unos familiares, se vino de viaje y también en casa ajena hizo las veces de televisión conectada, reproductor de música (vía Spotify) e incluso de consola. Con un mando Bluetooth y sus 21 pulgadas, jugar a Pac-Man Championship Edition o Cordy es una gozada.

¿QUÉ NOS HA GUSTADO MÁS?

   Por supuesto y en primer lugar: el tamaño de su pantalla. Eso es lo que distingue a este producto y lo que hace que se desmarque a la hora de consumir pelis, series y videojuegos.

   También su calidad sonora: nunca había utilizado una tableta que reprodujese sonidos tan alto, gracias a sus altavoces estéreo de 4W. De hecho, en una habitación normal no hay que llegar ni a la mitad de su potencia para ver una película si no hay ruido de fondo.

   Su interfaz. Como la Galaxy View está pensada para ver películas y series, Samsung ha incorporado una pantalla compuesta por ventanas que son accesos directos a algunos de los servicios más populares: Mitele, Atresplayer, Wuaki.tv, Netflix, Filmin... Los accesos están ahí, aunque hay que descargar las 'apps' con nuestra cuenta en Google Play. Por supuesto, se puede descargar cualquier otro 'software' y crear accesos directos en la pantalla de inicio habitual de Android.

   Bien diseñado, con dos puntos a destacar:

    - Su asa integrada es muy cómoda para transportarlo por la casa o si nos lo llevamos de viaje.

    - Su pestaña (inseparable del dispositivo, que permite ponerlo en vertical o en posición oblicua con respecto a la mesa, si se quiere dibujar).

¿SUS PUNTOS FLOJOS?

   La definición de la pantalla: aunque el tamaño es imponente y la resolución suficiente, lo cierto es que las distancias cortas no le hacen un favor. Hay que tener en cuenta que la resolución de su pantalla de 18,4 pulgadas (1080 x 1920 pixels) es menor que la de 5,1 pulgadas del S6 Edge (1440 x 2560 pixels) y eso de cerca "canta". Tampoco ayudan las 'apps' no optimizadas para tan gigantesca pantalla. Pasado el susto inicial al usarlo de cerca y cuando vemos películas a una distancia normal, el problema desaparece. Su resolución es la misma que la de televisiones Full HD de mayor tamaño y ese es, precisamente, el uso más habitual de este equipo.

   Cargador propio: el Galaxy View cuenta con puerto microUSB por si necesitamos conectar dispositivos periféricos, pero necesita de su propio cargador para la batería.

   La cámara interna es de 2.1 MP, 1600 x 1200 pixels, video 1080p@30fps. Teniendo en cuenta que las videoconferencias son otro uso bastante recomendable para un 'tablet' como este, pensado para sostenerse en vertical, habría sido deseable algo de mayor calidad.

   Que no vale para todo y que no lo puedes sacar de casa... a menos que vayas a otra casa o a un hotel. No es EL 'tablet' que recomendaría a nadie, sino un GRAN segundo 'tablet' o una estupenda alternativa, porque da mucho más de sí, a una televisión secundaria.

OTRAS ESPECIFICACIONES TÉCNICAS A TENER EN CUENTA:

   32GB/64GB memoria interna, 2GB RAM. Procesador Exynos 7580 octa-core 1.6GHz, GPU Mali-T720MP2. No es el equipo más potente del panorama, pero ha sido más que suficiente para todo lo que he hecho con él.

   Batería de 5700 mAh. Ofrece unas 7 u 8 horas de uso. Sin embargo, teniendo en cuenta lo mucho que consume su pantalla y el tamaño de la misma, Samsung podría haber incorporado algo de mayor tamaño, para garantizar así un mayor rendimiento. En cualquier caso, como este equipo está pensado para un uso en casa, siempre con el cargador a mano, el problema es menor.

   Como comentábamos, la Galaxy View permite conectar periféricos inalámbricos mediante Bluetooth v4.1 LE. Esto no solo incluye mandos para videojuegos, sino ratones o teclados, por lo que es un equipo que en un momento dado también puede hacer buen servicio a la hora de trabajar.

CONCLUSIÓN

    Los 649 euros que cuesta el Galaxy view son más de lo que cuesta una tele de estas dimensiones, pero también ofrece mucho más.

   Como ya he dicho: este es un producto muy especial, que no vale para todo, pero que cumple muy bien en determinados aspectos. Si necesitas una segunda tele en algún cuarto, un equipo para ver películas en una casa de veraneo o en un hotel, una segunda pantalla en el salón, una equipo con el que estén entretenidos los niños (dibujando, viendo dibujos, jugando)... El Galaxy View es una magnífica opción. Tan peculiar es por su gigantesco tamaño, que en este sentido, es la única opción. Eso sí: olvídate de sacarla de casa, excepto de forma muy puntual en viajes en los que no te importe llevar peso. Que quede claro: es un equipo interesante, pero como producto de apoyo, esto es, secundario.