PP pregunta a Narbona si aún opina que el Don Pedro no afectó al comercio a la luz de los datos de reclamaciones

MADRID 1 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados solicitará a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, que explique si mantiene que el vertido del mercante 'Don Pedro' en la costa de Ibiza no ha supuesto pérdidas para los comerciantes de las playas afectadas por la llegada de residuos.

Así lo detalló a Europa Press el diputado del PP por Baleares, Enrique Fajarnés, quien realizó iniciativas parlamentarias al respecto tras hacerse eco de los datos sobre las reclamaciones presentadas al Consell de Ibiza por 32 empresarios que entienden que el vertido del pecio afectó al rendimiento de sus locales, y que ascienden a poco más de 1,5 millones de euros.

Fajarnés recordó que en su comparecencia en la Comisión de Medio Ambiente el 25 de diciembre para explicar la gestión del Gobierno central ante el hundimiento del 'Don Pedro', Narbona aseguró que el vertido de combustible no había afectado a la actividad turística de la zona, y que lejos de resentirse, se había contemplados incrementos de ocupación del 87,7% durante la primera quincena de julio.

Narbona se refirió así a los datos que había proporcionado de la patronal hotelera de Ibiza y Formentera, y que se elevaron a una ocupación del 90% durante la segunda quincena del mes.

En este sentido, y en relación a los datos de las reclamaciones, el diputado 'popular' por Baleares aseguró que a la luz de estas cifras preguntará a la ministra si mantiene todavía esta posición que "de forma tan provocativa espetó" a los portavoces parlamentarios.

Por ello, también aclaró que él mismo solicitará este pronunciamiento en la próxima comparecencia de la ministra en sede parlamentaria, para recordarle además casos como la indemnización de 137.000 euros que ha pedido un restaurante de Talamanca.

Fajarnés subrayó que los datos de ocupación aludidos por la ministra se refieren exclusivamente a la ocupación hotelera --que en la mayoría de los casos cuentan con reservas contratadas con mucho tiempo de antelación--, omitiendo los efectos negativos para el pequeño comercio cuya actividad depende en gran medida del estado de las playas ibicenca.