Aborto- Urkullu se remite a una encíclica y defiende que la excomunión a diputados va más allá de lo que dice la Iglesia

Actualizado: sábado, 28 noviembre 2009 1:00

MADRID, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, se remitió hoy a la 'Encíclica Evangelium Vitae' de 1995, la undécima encíclica de Juan Pablo II, para defender que la excomunición a los diputados por apoyar la nueva ley del aborto "es ir más allá de lo que dice la Iglesia Católica".

En un artículo publicado en su blog, Urkullu, "como seguidor de Cristo y de un Dios misericordioso", recuerda que en el Evangelium Vitae n.73, en la Carta encíclica de Juan Pablo II se admite que un parlamentario "puede lícitamente ofrecer su apoyo" a propuestas, "cuando no sea posible evitar o abrogar completamente una ley abortista", que vayan encaminadas "a limitar los daños de esa ley y disminuir así los efectos negativos en el ámbito de la cultura y de la moralidad pública".

"En efecto, obrando de este modo no se presta una colaboración ilícita a una ley injusta; antes bien se realiza un intento legítimo y obligado de limitar sus aspectos inicuos", señala el texto al que apela en su blog el presidente del PNV, partido que apoyó la nueva ley en el Congreso.

Tras recordar que esto es lo que se recoge también en el Compendio Doctrina Social de la Iglesia n. 570, Urkullu enfatiza que esa es precisamente "la voluntad del EBB de EAJ-PNV y del Grupo Vasco en el Congreso de los diputados y senadores Nacionalistas".

En este sentido, reiteró que el PNV no apoya ni apoyará "el texto tal y como está redactado" y mostró su compromiso de "seguir trabajando pese" a las críticas hacia los nacionalistas vascos por parte del obispo auxiliar de la Diócesis de Bilbao, Mario Iceta, o de las declaraciones del nuevo obispo de la diócesis de San Sebastián, José Ignacio Munilla o "las reiteradas advertencias del portavoz de la Conferencia Episcopal, monseñor Rafael Martínez Camino.

También dice estar preocupado ante argumentaciones como la sostenida por el PP de que esta ley "atenta contra la dignidad de la mujer, privándola del derecho más inherente, el derecho a ser madre". Sobre este punto, defiende que la ley no está obligando a nadie a abortar.

Por último, el presidente del PNV dijo espera poder corregir algunas cuestiones sobre las que no está de acuerdo en el trámite de las enmiendas parciales.