MADRID, 12
El Tribunal Supremo ha anulado la pena de siete años de cárcel que la Audiencia Provincial de Huelva impuso por un delito continuado de abusos sexuales a un joven de 18 años que mantuvo relaciones consentidas con su novia de 12, que quedó embarazada, al considerar que en el momento de los hechos éste desconocía que su actuación pudiera ser delictiva.
El Supremo absuelve al joven de la condena que le fue impuesta en febrero de 2007 por el tribunal de instancia, al estimar que "ni siquiera tenía motivos objetivos para dudar" de que su conducta fuera ilícita y, por ello, su "error, ausente de todo aviso, era para él invencible".
La Audiencia Provincial condenó al acusado a pesar de considerar probado que los dos jóvenes eran novios en el momento en que mantuvieron relaciones, que ambos conversaron sobre esta posibilidad antes de llevarla a cabo y que la menor accedió tras pedirle a su compañero un periodo de reflexión.
La sentencia condenatoria especificaba que en las relaciones "no se empleó violencia ni intimidación" y que, como consecuencia de éstas, la menor quedó embarazada y abortó con posterioridad. Asimismo, señalaba que el joven cumplió la mayoría de edad un mes antes de los hechos y que a su novia le faltaba otro mes para cumplir los 13, edad en la que se exime la responsabilidad penal de cualquier relación sexual no coactiva.
PENSÓ QUE ERA LÍCITO
Según la resolución del alto tribunal, de la que ha sido ponente el magistrado Luciano Varela, los magistrados de la Audiencia Provincial de Huelva presupusieron que el joven "no se encontraba preso de error sobre la trascendencia jurídica de su comportamiento".
Sin embargo, el Supremo considera "harto creíble" que el joven "pudiera pensar que su comportamiento era tan lícito como lo sería de reiterarse unos días más tarde". "El acusado no es culpable cuando no pudo haber tenido la conciencia de que su comportamiento era antijurídico", afirma.
