MADRID 13 Abr. (EUROPA PRESS) -
El autor del libro 'Ignacio de Loyola' (Taurus), Enrique García Hernán, ha asegurado que la biografía de este vasco y santo que fue fundador de la Compañía de Jesús --a la que pertenece el Papa Francisco--, puede ayudar a entender "cómo es posible una tercera España, la de la conciliación", una España de las autonomías pero unida.
"La capacidad de negociación en su vida nos ayuda a comprender la historia de España y cómo es posible una tercera España. Si él viviera nos diría que él es español y que es posible una España de las autonomías, de los territorios, de cada uno independiente pero todos unidos", ha subrayado.
En una entrevista concedida a Europa Press, García Hernán ha animado a los políticos españoles a leerse su libro porque puede ayudarles a aprender a utilizar la mediación, sobre todo, en el sentido de la "capacidad de ceder", ya que Ignacio de Loyola, que siempre estuvo entre luchas, enseña que "todos tienen que ceder algo para comprenderse".
Además, ha afirmado que mirar un poco a la Compañía de Jesús podría ayudar a España a salir de la crisis pues esta orden pasó por muchas. De hecho, Ignacio de Loyola pidió a los primeros jesuitas que escribieran un tratado sobre cómo salir de la crisis. Según ha apuntado García Hernán, el pensamiento de Íñigo iba en la dirección de lo que decía Santa Teresa: "Que lo que había que repartir no es la riqueza sino la pobreza, es decir, que los ricos adopten voluntariamente la pobreza".
Sobre el hecho de que el Papa Francisco sea jesuita, el autor ha señalado que seguramente "tratará de imitar a Ignacio, de seguir sus pasos", es decir, que irá a todo el mundo sin ser exclusivista de nadie, especialmente a los más necesitados intelectual y espiritualmente, a los pobres, los enfermos, los más alejados y se preocupará por la formación de la juventud.
A su juicio, la elección de un Papa religioso y concretamente jesuita "llama la atención" después de tantos siglos que lleva en pie la Compañía y tras pasar por momentos tan difíciles como su total supresión por parte de un Papa hasta bien entrado el siglo XIX. En cualquier caso, considera que Francisco "podrá hacer grandes cosas".
En cuanto a si le gustaría a Ignacio de Loyola saber que un jesuita ha llegado a Papa, García Hernán ha indicado que Íñigo sabía que era posible pues, de hecho, Francisco de Borja estuvo a punto de ser elegido tras la muerte de Pío V. "Que lo deseara, no parece, pues pensaba que a lo mejor para un jesuita ser elegido Papa le iba a dificultar su misión porque entendía que la misión del jesuita es servicio, atención a los necesitados, formación de los niños", ha precisado.
Para García Hernán, el pensamiento del fundador de la Compañía de Jesús sigue hoy "totalmente vigente" y su biografía ayuda a uno a entenderse a sí mismo, tanto que, según ha contado, Cervantes --que se había formado con los jesuitas-- la utilizó para escribir El Quijote. Así, el libro cuenta cómo utilizaba sus recursos naturales y aquellos que fue adquiriendo con los ejercicios para comprender a las personas, a las que era capaz de descubrir con solo una mirada y recuerda que Íñigo les dio a los jesuitas unas instrucciones sobre cómo tratar a las personas, a los príncipes, a los pobres, a las mujeres, a los niños, etcétera.
Además, García Hernán afirma que el libro también ayudará a adentrarse en la historia de España, ya que antes de ser jesuita, Íñigo sirvió a la nobleza española --estuvo al servicio de Carlos V y Felipe II, Juana de Austria llegó a ser jesuita en secreto y fue confesor de Margarita de Austria--, conocía bien los entresijos de la política mediterránea e incluso llegó a diseñar un plan de conquista de Jerusalén para recuperar los Santos Lugares.