EE.UU desarrolla una nueva clase de plásticos biodegradables en el agua de mar

Actualizado: martes, 27 marzo 2007 18:28


MADRID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -

Investigadores de la Universidad de Mississipi del Sur han desarrollado un tipo de plásticos que se degradan cuando entran en contacto con el agua de mar y cuya descomposición produce productos no tóxicos que existen ya en la naturaleza. Las conclusiones de su investigación sobre estos plásticos, aún no listos para su comercialización, se han hecho públicas durante la reunión nacional de la Sociedad Americana de Química que se celebra estos días en Chicago (Estados Unidos).

Los plásticos convencionales pueden tardar años en descomponerse y podrían dar lugar a subproductos nocivos para el medioambiente y tóxicos para los organismos marinos. Los plásticos desarrollados por los investigadores son capaces de degradarse en sólo 20 días y producen subproductos naturales no tóxicos, señalan los investigadores.

Estos plásticos están hechos de poliuretano que ha sido modificado por la incorporación de PLGA [poly (D,L-lactide-co-glycolide)], en su denominación en inglés, un polímero conocido por su utilización en las suturas quirúrgicas y en aplicaciones para la administración de fármacos. Los investigadores han conseguido un amplio rango de cualidades de estos plásticos gracias a variaciones en su composición química, así dependiendo del uso al que se dirijan éstos pueden ser más rígidos o blandos, por ejemplo.

Según los investigadores, cuando se exponen al agua de mar, estos plásticos se degradan a través de la hidrólisis en productos no tóxicos. En función de la composición de los plásticos, estos componentes podrían incluir agua, dióxido de carbono, ácido láctico, ácido glicólico, ácido sucínico, ácido caproico y L-lisina, elementos que se encuentran todos en la naturaleza, indican sus desarrolladores.

Según Robson F. Storey, director del trabajo, los nuevos plásticos son más densos que el agua salada por lo que tienen la tendencia a hundirse en vez de flotar, característica que también podría evitar que lleguen a tierra y contaminen las playas.

Storey explica que estos plásticos aún no están listos para su comercialización ya que son necesarios más estudios para comprobar cómo se degradan en las diferentes condiciones ambientales como cambios de temperatura, humedad y composición marina. Además existen obstáculos legales como la prohibición internacional de arrojar plásticos al mar.