SALAMANCA 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Castilla y León declaró situación de alerta por riesgos de incendios durante los días 4 al 6 de agosto se espera una masa de aire caliente en altura de más de 25 grados, que trae consigo un aumento en la severidad atmosférica de cara al riesgo de incendios.
Según informó la Junta a través de un comunicado de prensa esta situación se caracteriza por el incremento de las temperaturas máximas y un moderado incremento de las mínimas nocturnas con ausencia de precipitaciones e inestabilidad atmosférica muy alta, con posibilidad de originar vientos racheados.
Desde la Junta se aseguró que esta circunstancia meteorológica favorece el inicio y posterior propagación de los incendios, agravado además por la sequía que ya arrastra la vegetación debido a la escasez de precipitaciones de esta primavera.
Debido a ello, según anunció la Junta de Castilla y León, en caso de producirse un incendio, la velocidad de propagación del mismo los días señalados sería muy alta en toda la comunidad, por lo que los posibles incendios podrían tener un comportamiento extremadamente peligroso y virulento.