Los médicos discrepan sobre si la infanticida de El Masnou (Barcelona) era consciente al matar a su hija

Actualizado: miércoles, 1 julio 2009 18:00

BARCELONA, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

Las peritos psiquiátricos no se pusieron hoy de acuerdo sobre si la mujer juzgada por matar a su hija en El Masnou (Barcelona) y que después se intentó suicidar era consciente de los hechos.

La Fiscalía pide 20 años de prisión para María Josefa C.F., al considerar que la noche del 13 al 14 de marzo de 2007 asesinó a su hija asfixiándola y por la mañana se lanzó por la ventana de un primer piso tras dejar siete cartas de despedida para sus familiares.

En el último día de juicio con jurado, las cuatro doctoras que analizaron psicológica y psiquiátricamente a la acusada discreparon en si la mujer era totalmente consciente de que estaba matando a su hija y que aquello estaba mal, debido a su estado psicológico previo --estrés por problemas familiares-- o a la ingesta de pastillas --aunque no está probado que las llegara a metabolizar--.

Según una psiquiátrica, la acusada tenía las facultades mentales "anuladas" en aquel momento, ya que, según su análisis, María Josefa C.F. es una mujer muy "rígida" que no se salta las normas ni reglas morales. En cambio, otra perito sostuvo que no hace falta tener una afectación mental para saltarse por una vez estas normas.

Esta médico, además, considera que los dos intentos de suicidio --tomarse pastillas y tirarse por la ventana-- pueden responder a la situación momentánea y no a una alteración mental de más largo recorrido.

Igualmente, admitió que la acusada mantuvo desde el primer momento que no recordaba qué había ocurrido, algo que considera que puede ser verdad, ya que es "compatible" con la situación vivida, la ingesta de pastillas o la defenestración.

En cambio, para otra forense no es "normal" intentar suicidarse, por lo que deduce que la mujer sufría alguna patología psíquica. Según ella, al escribir las cartas y matar a su hija, la acusada podía estar "despierta, lúcida", pero probablemente no era totalmente consciente de las consecuencias de sus actos, en lo que consideró que podría tratarse de un "suicidio ampliado" por creer, en aquel momento, que era lo "mejor" para su hija.

Por el contrario, la primera doctora consideró que escribir siete cartas de despido y todas las horas que pasaron entre la muerte de la niña y su segundo intento de suicidio --más de doce horas-- evidencian que la mujer era consciente de lo que hacía, como también sostuvo la fiscal. Lo que sí reconoció esta psiquiatra es que la mujer no pudo haber planificado todos los hechos y después no acordarse de ellos.

En su informes final, la Fiscalía mantuvo que la acusada asesinó a su hija conscientemente al no ver salida a su relación sentimental con su marido, que se había ido de casa dos días antes y que no tenía buena relación con la familia de ella.

El abogado de la defensa pidió al jurado que tenga en cuenta la alteración mental que sufrió la mujer aquella noche.