Naufragio.- Abandona el hospital el patrón mayor del 'Cordero', tras siete días ingresado

Actualizado: lunes, 21 enero 2008 16:21

LA CORUÑA, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -

Marcos Antonio Ures García, el patrón mayor del pesquero 'Cordero', que naufragó el pasado martes a 30 millas de Cabo Prior, recibió el alta médica este mediodía tras permanecer ingresado siete días en el Hospital Juan Canalejo en La Coruña, debido a la entrada de agua en los pulmones.

El patrón, de 29 años de edad y natural de Ribeira aunque casado en Malpica, abandonó el hospital a las 14.45 horas, visiblemente abatido y cabizbajo con lo que sólo llegó a contestar con un escueto "bien" cuando fue preguntado por su estado cuando salió del Juan Canalejo acompañado por su mujer para inmediatamente subirse a un coche que lo estaba esperando.

Marcos Antonio Ures ingresó el día del naufragio en el centro hospitalario con un cuadro clínico de hipotermia "leve", lo que lo obligó a estar dos días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

En los primeros días del naufragio, en el que murió el primer mecánico y están desaparecidos cuatro marineros, fuentes cercanas a la empresa armadora admitieron que se encontraba "muy nervioso" y en estado de 'shock' por lo acontecido, aunque destacaron que lo largo de estas jornadas había mejorado y estaba "más relajado y más tranquilo".

Precisamente, uno de los armadores del 'Cordero' José María Santiago elogió la profesionalidad del patrón y su comportamiento "ejemplar y valiente" cuya actuación en el momento del naufragio fue decisiva para que hoy continúen con vida el contramaestre, José Manuel Parada, y otro marinero Hendra Henowan, de nacionalidad indonesia. "Gracias a él están vivos", aseguró.

"Tuvo un temple y una valentía ejemplar, que muy difícilmente yo pudiese reproducir con mis más de 30 años de experiencia", admitió el armador con respecto a Marcos Antonio Ures, quien emplazó a todos los miembros de la tripulación a cogerse de la mano y hacer un círculo mientras los efectivos de salvamento no llegaban a rescatarlos.

Durante ese período, uno de los miembros de la tripulación llegó a soltarse, al desfallecer por el cansancio, y fue el propio Marcos Antonio Ures quien volvió a por él para mantenerlo en el círculo, según le relató al armador el contramaestre y otro de los supervivientes, José Manuel Parada.

Los otros dos supervivientes, además de Marcos Antonio Ures García, recibieron a última hora de la mañana del miércoles el alta médica, tras permanecer en observación debido a la hipotermia que sufrieron como consecuencia del siniestro del arrastrero.

Ambos han preferido dejar para hoy lunes su declaración ante la Capitanía Marítima de Ribeira, ya que fueron llamados el miércoles para intentar esclarecer el origen del siniestro, a 30 millas de Cabo Prior (La Coruña) y que que se saldó con un fallecido, Francisco Alboreda Rey, y cuatro desaparecidos: los gallegos Alberto Otero González y José Alfonso Sotelo y otros dos de nacionalidad indonesia.