El Papa pide a los nuevos obispos que se alejen del narcisismo y que mejoren su capacidad de discernimiento

ROMA 14 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Papa ha advertido a nuevos obispos de que su misión debe alejarse del afán de protagonismo y del narcisismo al tiempo que les ha instado a saber discernir caso por caso.

"Su misión no es llevar ideas o proyectos propios, ni soluciones abstractas ideadas por quien considera la Iglesia un huerto en su casa, sino humildemente, sin protagonismos o narcisismos, ofrecer vuestro testimonio concreto de unión con Dios, sirviendo al Evangelio que va cultivado y ayudado a crecer en esa situación específica", ha especificado durante la audiencia en el Vaticano a los participantes en el Curso de Formación para nuevos prelados.

Asimismo, ha instado a mejorar su capacidad de discernimiento y a aplicarlo como un "remedio al inmovilismo del 'si está siempre hecho así' o del 'tomemos tiempo'". "No os dejéis aprisionar por la nostalgia de poder tener una sola respuesta a aplicar en todos los casos", ha agregado.

Francisco les ha pedido que den un auténtico testimonio de Dios porque el hombre "continúa gritando la necesidad de ser ayudado a afrontar las dramáticas cuestiones que le atormentan" y "de ser iniciado en el misterio de la propia búsqueda de vida y felicidad".

Por otro lado, ha explicado que "el discernimiento nada en el corazón y en la mente del obispo a través de su oración, cuando pone en contacto a las personas y las situaciones que les confía la Palabra pronunciada por el Espíritu". Así, ha señalado que el discernimiento es siempre "una acción comunitaria que no prescinde del parecer de sus presbíteros y diáconos, del pueblo de Dios y de todos los que pueden ofrecerle una contribución útil".

Por ello, les ha instado a "cultivar una actitud de escucha, creciendo en la libertad de renunciar al propio punto de vista (cuando se muestra parcial e insuficiente) para asumir el de Dios".

Finalmente, Francisco les ha exhortado a prestar especial atención a los jóvenes, las familias y los sacerdotes, así como a "aquellos que tienen la posibilidad de guiar la sociedad" para que encuentren en ellos "el buen testimonio" de la Palabra de Dios.