El Papa en una foto de archivo - Evandro Inetti/ZUMA Press Wire/d / DPA
ROMA 29 May. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha señalado el "creciente antisemitismo" como una de las amenazas a los derechos humanos fundamentales. "No sólo en Europa, sino también en otras partes del mundo, los derechos humanos fundamentales parecen estar amenazados en este momento: debido al creciente antisemitismo, al racismo y a otras ideologías que tienden al extremismo y a la violencia", asegura Francisco en su mensaje a la 103 Jornadas Católicas Alemanas. Katholikentag 2024.
Francisco hace también un llamamiento a los cristianos a comprometerse en lo público y en la política para que todos tengan mejores condiciones de vida y, sobre todo, para dar voz a los que no son escuchados.
El encuentro, que se celebra en Erfurt del 29 de mayo al 2 de junio y que cuenta con cerca de 500 actos sobre la paz, la democracia, el cambio climático o el futuro de la Iglesia. En las reuniones -en las que está previsto que participen unas 20.000 personas en la capital de Turingia- habrá una mesa redonda con el canciller Olaf Scholz sobre el tema 'Fortalecer la comunidad-Configurar la sociedad'.
"Sin justicia, no puede haber paz", subraya el Papa. Además, destaca que las numerosas crisis morales, sociales, económicas y políticas que atraviesa el mundo están todas interconectadas.
"La preocupación por la naturaleza, la justicia con los pobres, el compromiso con la sociedad, la protección de la vida y la familia, la defensa de la dignidad de toda vida humana, así como la paz exterior e interior, van de la mano. Los problemas afectan a todos y sólo pueden resolverse juntos. Y para ello es necesario un amplio diálogo, a ser posible con muchas voces en todos los niveles de la vida social, económica y política", señala.
El Papa elogia la cita de los católicos alemanes al destacar su labor para concienciar al mundo sobre una necesaria conversión y una verdadera reorientación. "Lo que se quiere decir aquí es lo que sienten y dicen tantas personas, sobre todo jóvenes, de procedencias culturales e ideológicas muy diversas: perciben que algo va mal en el hombre y en el mundo, que no podemos seguir como hasta ahora", reflexiona.
En este contexto, considera "muy bonito" y muy significativo que el Katholikentag sea también un lugar de encuentro ecuménico y de diálogo interreligioso.