MÉRIDA, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, hizo ayer sábado en Badajoz un reconocimiento a todos los que "han trabajado duro durante estos años para que en España podamos disfrutar de las cotas de libertad que actualmente hay" a la hora de que cada uno pueda elegir la opción sexual que prefiera.
Fernández Vara hizo estas declaraciones en la gala de clausura del X Festival de Cine Gay y Lésbico de Extremadura, que se celebró ayer por la noche en el Teatro López de Ayala de Badajoz.
El jefe del Ejecutivo extremeño afirmó que la sociedad española debe sentirse "orgullosa" del grado de libertad e igualdad alcanzadas en este ámbito y, a la vez, reflexionó que esas cotas alcanzadas deben "obligarnos a seguir trabajando para mantenerlas y para propagarlas por todo el mundo mediante la cooperación internacional", afirmó.
En ese sentido, el presidente indicó que "mientras haya países donde la opción sexual sea castigada con la cárcel o con la muerte, nos quedará camino por recorrer", y añadió que evitar eso "debe ser nuestro objetivos para el futuro", informó la Junta.
Fernández Vara recordó que la pasos que se han dado en los últimos años a favor de la libertad y la igualdad de derechos de gays, lesbianas y transexuales "no es fruto de la casualidad", sino de que "un gobierno, el de José Luis Rodríguez Zapatero, apostó porque en España todos seamos más iguales y más libres. Nada de esto proviene de la casualidad, sino del trabajo de un mucha gente", dijo.
PREMIO A RODRÍGUEZ IBARRA.
La gala de clausura del festival se cerró con la entrega al ex presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, del premio Fancinegay Décimo Aniversario. Un galardón que el propio Rodríguez Ibarra recibió de manos del actual presidente del Gobierno regional.
Guillermo Fernández Vara quiso reconocer que durante los 12 años en los que trabajó en el gobierno de Rodríguez Ibarra sólo tenía un límite, en concreto, que su trabajo supusiese "dar más libertad y más igualdad a los extremeños".
Por su parte, Rodríguez Ibarra reconoció que durante sus 24 años de mandato se "obsesionó" con la economía y pensó que todos los extremeños que emigraron en las décadas de los 60 y los 70 lo hicieron por dinero. Para contrarrestar esto y evitar una nueva emigración, según el ex presidente, se trabajó "muy duro para impedir una nueva salida". En ese punto, Rodríguez Ibarra reconoció que se olvidó de que "unos pocos se fueron de Extremadura, además, porque su opción sexual era diferente y estaba perseguida".
Por ello, aseguró que en lugar de comenzar a trabajar para facilitar la cosas al colectivo de gays y lesbianas en los años 90, debería haberlo hecho en los 80 y "seguro que se hubiesen tenido que marchar de Extremadura menos personas", concluyó.