MADRID 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
El vaticanista Andrea Tornielli analiza en un artículo publicado en el número de octubre de la revista 'Palabra' la "nueva mirada" y la "revolución copernicana" que el Papa Francisco está llevando a cabo y que a su juicio se han visto reflejadas en la entrevista publicada hace dos semanas por las revistas jesuitas.
En el artículo, titulado 'Jorge Mario, sacerdote y Papa' y recogido por Europa Press, también se refiere a la alusión que hace el Pontífice al aborto, al matrimonio homosexual o al uso de anticonceptivos, sobre los que dijo que no hay que insistir tanto.
"El anuncio misionero --en palabras de Francisco-- se concentra en lo esencial, en lo necesario, que, por otra parte es lo que más apasiona y atrae, es lo que hace arder el corazón, como a los discípulos de Emaús".
Ante esta reflexión, Tornielli se pregunta si esto cambia la doctrina o las normas morales para responder que "el Papa no dice eso" sino que, por el contrario, explica que hay que "encontrar un nuevo equilibrio" pues de otra manera, "el edificio moral de la Iglesia corre el peligro de caer como un castillo de naipes, de perder la frescura y el perfume del Evangelio".
Para Tornielli, "si los hombres y las mujeres han perdido el sentido del pecado, no serán los discursos sobre los valores morales ni la repetición de las enseñanzas morales de la Iglesia en un marco rigorista las que harán arder el corazón".
Por eso, según remarca, el "Papa párroco y confesor" pide a la Iglesia, y en primer lugar a sus pastores, una conversión pastoral, "para que se vea mejor el rostro de la misericordia, se encuentre a las personas, se las pueda acompañar en sus caminos y en sus dificultades".
Tornielli destaca que una de las características distintivas de Francisco es el hecho del haber sido párroco en San Miguel y, por tanto, de tener "una sencilla experiencia pastoral".
De hecho, cuenta que, primero como obispo auxiliar y luego como arzobispo de Buenos Aires, "nunca ha dejado de confesar fieles, de caminar muchísimo por la calle, de celebrar con el pueblo, de ser un pastor con el olor de las ovejas".