La defensa de Ibar va a solicitar la nulidad del proceso y pedirá pruebas dactilares y de ADN

Actualizado: martes, 17 marzo 2009 15:49


NUEVA YORK, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

La defensa de Pablo Ibar, el español condenado a muerte en Florida (Estados Unidos), tiene la intención de solicitar la nulidad del juicio y de pedir que se realicen pruebas dactilares y de ADN, según anunció hoy la Asociación contra la Pena de Muerte 'Pablo Ibar' con motivo de la celebración de la segunda sesión de la vista probatoria en un tribunal del condado de Broward, al norte de Miami.

La asociación hizo este anuncio después de que en la sesión de ayer se presentase ante el tribunal la declaración jurada del experto británico Raymond Evans, el cual aseguró que "dada la mala calidad y la escasez de pruebas de vídeo e imágenes fijas (...) no es posible llegar a la conclusión de que el perpetrador y Pablo Ibar son una y la misma persona".

"El simple hecho de que alguien tenga cierto parecido con otra persona no nos permite llegar a la conclusión de que son una y la misma persona", prosiguió. "Todas estas similitudes y diferencias están basadas en el uso de material de calidad muy deficiente" y el mal estado del material del delito "impide su utilización en cualquier ejercicio de identificación positiva y no debe confiarse en el mismo para esta labor", añadió.

Raymond Evans --cuyo testimonio fue solicitado por el nuevo abogado de Ibar, Benjamin Waxman-- está colegiado como testigo pericial en identificación facial y es director de la Unidad del Arte en la Medicina de la Universidad de Manchester, en Reino Unido. Esta unidad "se dedica a la investigación de la morfología facial, la identificación facial, el reconocimiento facial y la reconstrucción facial", según explicó él mismo en la declaración jurada.

Al respecto, la asociación anunció hoy que la defensa de Pablo Ibar está estudiando estos nuevos datos y "en el caso de que llegue a la conclusión de que dichas informaciones están fundamentadas, presentará las oportunas solicitudes juradas firmadas por Pablo Ibar para que se realicen los oportunos cotejos de huellas dactilares y ADN".

Las normas procesales penales vigentes en la actualidad en Estados Unidos establecen que una situación como ésta, Pablo Ibar tendría, siempre que la defensa compruebe que tal información está fundamentada, que firmar sendas peticiones bajo juramento para solicitar que se realizaran las oportunas comparaciones de ADN y de huellas digitales. Si el juez estimara estas peticiones, ordenaría al Estado de Florida la realización de estas pruebas.

Aparte, la asociación indicó que durante la audiencia probatoria que comenzó ayer "se va a solicitar la nulidad del juicio con el argumento de que los derechos constitucionales de Pablo Ibar no fueron respetados".

EL CASO Y LAS PRUEBAS

Ibar fue condenado a muerte en 2000 por el presunto asesinato, en 1994, del propietario de una vivienda de Mirarmar (Florida), Casimir Sucharski, y de dos mujeres, Sharon Anderson y Marie Rodgers. Según la asociación de apoyo al español, el abogado de oficio reconoció públicamente que no había hecho una buena defensa y que sentía que "por su culpa" hubiera una persona en el corredor de la muerte.

Asimismo, varios expertos juristas denunciaron "importantes irregularidades procesales" durante el desarrollo de las investigaciones y el juicio (por ejemplo, una rueda de reconocimiento en ausencia de un abogado) y, según la asociación, "ninguna" de las pruebas de ADN, huellas dactilares y análisis de pelos realizadas sobre muestras tomadas en el lugar de los hechos, correspondieron con el ADN, huellas dactilares o pelo de Pablo Ibar, "a pesar de que los asesinos permanecieron durante 22 minutos en el salón de la casa, durante los cuales son grabados todos sus movimientos".

"La principal prueba inculpatoria para Pablo Ibar es una fotografía obtenida de una imagen de malísima calidad extraída del vídeo que grabó el crimen y posteriormente manipulada", una prueba que "en España no podría utilizarse en un juicio debido a la manipulación sufrida".

Precisamente, esta prueba es la que ha puesto en entredicho el experto británico. Los tres fiscales del Estado de Florida argumentaron ayer que el perito es británico y no estadounidense, por lo que "no es imparcial". El juez ha aplazado su pronunciamiento sobre la admisibilidad, pero consintió que se presentara su testimonio.

Al respecto, los familiares de Ibar afirmaron hoy que "parece que lo principal para el Estado de Florida no es el fondo de los asuntos, por ejemplo el contenido del peritaje de Raymond Evans, sino cuestionar la adminsibilidad de su peritaje en base a cuestiones como su nacionalidad, tratándose como se trata de un experto de reputación mundial en materia de reconocimiento facial".