VALLADOLID 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, afirmó hoy que se lleva a cabo una investigación sobre la cena celebrada entre miembros de la Guardia Civil y responsables de la constructora Zarzuela, la cual, supuestamente, corrió con los gastos del banquete.
Miguel Alejo, en una rueda de prensa en la que se presentaron las unidades de lucha contra delitos urbanísticos de la Guardia Civil, indicó que ordenó al general jefe de la Zona de Castilla y León, Pedro Laguna Palacios, que abriera una investigación al respecto.
Así, el delegado del Gobierno indicó que se trata, "sin prejuzgar nada", de conocer las circunstancias de esta cena y que no haya "ninguna sombra de duda" en el comportamiento de los guardias civiles que asistieron a esa reunión.
Alejo explicó que de esta forma, cuando se cuente con el resultado de la investigación, que el general pretende que sea "exhaustiva", y se aclaren las circunstancias, se "tranquilizará o lo que sea menester" de acuerdo con lo que determinen las pesquisas.
En este contexto, aclaró que no hay un plazo de tiempo para finalizar esta investigación, sino que durará lo que se estime necesario.
La cena fue celebrada hace unas semanas en un restaurante de la capital entre agentes de la Unidad de Tráfico de la Guardia Civil y responsables de la constructora Zarzuela S.A, mercantil que, supuestamente, corrió con los gastos del banquete.
Tras darse a conocer ese supuesto encuentro gastronómico entre ambas partes, fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Valladolid confirmaron a Europa Press que su titular, Cecilio Vadillo, ordenó abrir una información reservada al objeto de determinar la veracidad del mismo, identidad y número de agentes que participaron y motivo que les llevó a compartir mesa y mantel con los directivos de la constructora aludida, todo ello por si la actuación de los funcionarios pudiera contravenir el Régimen Disciplinario del Cuerpo.
La cena se desarrolló en el Centro Segoviano, en Valladolid capital, con la participación de entre 40 y 50 agentes de dicho destacamento, encargados de controlar la circulación en la carretera, si bien los gastos de la misma corrieron por cuenta de la constructora.